La comunidad venezolana pronto será la primera extranjera en la ciudad por su número si Maduro continúa mucho tiempo más, lo que con seguridad acentuaría el éxodo de la población y la catástrofe de un país convertido a estas alturas en Estado fallido. En apenas unos meses, el censo vigués de residentes de nacionalidad venezolana creció de 900 a 1.400 y ya está a punto de superar a la colonia portuguesa, instalada en Vigo desde hace años, lo que constituiría además de una sorpresa relativa la confirmación de como están las cosas en Caracas. Galicia es un lugar importante para los venezolanos, muchos de ellos con familiares que salieron del puerto vigués en las líneas regulares que durante años enlazaban la Estación Marítima con La Guaira. Hasta los años setenta funcionó una autopista marítima pensada sobre todo para llevar emigrantes gallegos al otro lado del Atlántico. El mismo edificio juega el papel contrario: es de entrada de turistas y no de hombres y mujeres que buscaban un futuro mejor.
En Vigo hay ciudadanos venezolanos instalados desde hace diez o más años, algunos en puestos de relevancia, como la dirección de l terminal marítima, por donde entra y sale el comercio internacional desde y hacia las industrias viguesas. Es un ejemplo, pero hay muchos más. Probablemente la mayoría optaría por quedarse en España-Galicia-Vigo en cualquier caso, pero prácticamente todos quieren que acabe la pesadilla y su país deje de ser una excepción -mezcla de populismo e incompetencia con dosis máximas de corrupción y violencia- para que se convierta en una nación normal, capaz de sacar provecho de sus riquezas naturales y donde se pueda vivir. No parece mucho, pero lo es. Continuará...
