Opinión

turismo contra la guerra

Como se esperaba, julio de 2017 ha sido el mejor de la historia para el turismo vigués. Y con agosto pasará lo mismo. El turismo crece y crece en Europa, en España, en Galicia y también en Vigo. Y esto no se debe al genio de quienes gobiernan sino sobre todo al fracaso de la Primavera Árabe que ha traído como consecuencia la caída en picado de destinos en Marruecos, Túnez, Egipto y también Turquía. Así que salvo los más pudientes, que se pueden ir a China o las Seychelles, la mayoría de los europeos optan por quedarse en el continente en los lugares considerados seguros: España, Francia e Italia, también Alemania o Reino Unido -aunque en estos casos son más exportadores que importadores- con sus clases medias huyendo de las zonas de guerra e invadiendo el Mediterráneo y otras costas más alejadas. Como Galicia. Como Vigo. 
Así lo contaba el diario "Público", el de Portugal, en un gran artículo firmado por Joao Miguel Tavares, donde adem´s sostiene que hacer turismo es también una forma de combatir el terrorismo y que cada turista es un combatiente contra el Estado Islámico, así que, en definitiva, hay que cuidarlos y no ahuyentarlos. 
No puedo estar más de acuerdo con esta reflexión, certera y bien planteada. Y defendida con datos objetivos. Véase este mes en Vigo: récord histórico total sustentado por la llegada de extranjeros debido a todo lo dicho anteriormente, con el añadido de la existencia de rutas europeas directas que se incluyen en la ecuación. Los hoteles han estado llenos y con ello han movido empleo y recursos, generando riqueza, pagando impuestos. 
El turismo es bienvenido y hay que tratarlo bien. Todos somos turistas. Incluso los de Vigo en Cangas y viceversa. Continuará...

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