Opinión

cumplir una norma ilegal

Vigo es su puerto y casi todo lo bueno o malo que sucede en su territorio, donde se mueven miles de toneladas de carga general, pescado o contenedores, afecta a la Muy Leal, igual que sucede con la subida o bajada de la producción de PSA. Esto es bien conocido, pero quizá nunca ha resultado tan evidente como ahora, cuando se acumulan las malas noticias, nubarrones sobre los muelles que se expanden sobre toda la Muy Leal. 
Lo explicaba en detalle Eduardo Fernández Davila, a quien se le podría considerar como el auténtico pilar del puerto –sus empresas gestionan los dos extremos, la terminal de Guixar y la Marina de Bouzas- y quien ayer reconocía su preocupación por cómo marchan las cosas. Apuntaba en la presentación de las dos nuevas grúas que ya se puede observar en la terminal una reducción del número de contenedores con la marcha a Marín de Maersk, una naviera clave para el puerto por cuanto transporta pescado congelado y supone la puerta de salida de las exportaciones. 
Maersk optó por trasladar sus servicios a Marín por una sola razón: aunque el puerto de la Ría de Pontevedra es inferior en todo al de Vigo, es también mucho más barato. No hay otra explicación ni razón. Marín dispone de una terminal menos eficiente y de una plataforma inferior y no digamos de grúas adecuadas, pero todo palidece ante la inexistencia en la práctica de una sociedad de estiba... por lo que las operadoras pueden contratar libremente personal y ajustar además horarios de trabajo en función de las necesidades. Por tanto, todo lo que no existe en Vigo. El escarnio añadido viene por cuanto la estiba viguesa, como la de otros grandes puertos, ha sido sancionada por el Tribunal Europeo y la Comisión Europea, que han enviado requerimientos al Estado español para que ponga punto final al régimen de monopolio. Como no hay Gobierno, tampoco hay legislativo, y así seguirán las cosas al menos hasta que se aclare el PSOE.
Así que Vigo pierde tráfico por estar obligado a cumplir una norma ilegal. Mientras Marín, que cuenta con una terminal anulada por los tribunales, se aprovecha de una situación cuando menos doblemente absurda. Continuará...

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