Desconozco el origen del refrán, que todos sabemos, y consecuentemente la relación que tiene la mona y la seda o al revés, ¡qué más da! Pero la cosa, lo de la seda que la mona lleva, tiene su gracia, su actualidad y su "chispa". Claro que ahora vivimos en un mundo en el que se hacen buenas las palabras de Don Hilarión en la zarzuela "La verbena de la Paloma": "Hoy las ciencias adelantan que es una barbaridad, una bestialidad, una brutalidad." Imposible imaginar las fiestas madrileñas de la Paloma, el 15 de agosto, sin traer a la memoria a los miles de madrileños que allí acuden todos vestidos como un "pincel", ya sea la Casta, la Susana, los chulapos o los vejestorios rememorando su juventud entre socarronería, añoranzas verdes o con picardía incluida. Intrigado estoy pensando si esas tradiciones tan castizas ya sea en Lavapiés, Chueca o Chamberí van a seguir vigentes precisamente porque "las ciencias adelantan..."
Pero voy a quedarme con la canción del jiennense Joaquín Sabina, que acaso viene más a cuento por su concreción. Dice: "Hoy los tiempos adelantan/ que es una barbaridad,/ el que no camina, corre/ ¡o está aprendiendo a volar!/ Si quiere llegar más lejos/ no necesita ascensor:/ hágase con un padrino y monte en televisión./ Quede usted tranquilo, amigo,/ no condene lo que a otros/ les puede desenrollar./ Dos y dos ya no son cuatro;/ cuatro y dos ya no son seis;/ seis y dos ya no son ocho,/ ni ocho y ocho dieciséis./ Dices que pasas de todo,/ y me temo lo peor..." Vamos, siguiendo con la música, a lo mejor hasta tenía razón Gardel con "Cambalache": "El mundo es y será una porquería, ya lo ves..."
En este cambio veloz y trepidante las mudanzas lo son en todo, vestimentas incluidas y vamos a ver en qué acaba el negocio de las corbatas, por poner un ejemplo, porque de la etiqueta y los trajes llamados "de vestir" ya ni se habla. Se quiere igualar a todos y me pregunto dónde se pueden poner las cotas de esa igualdad. ¿A dónde vamos a llegar con esa velocidad que estamos, o están y quieren imprimir algunos a la marcha de la sociedad? A lo mejor hasta van a tener razón y cualquier día se suprimen recepciones, tradiciones y demás y nos plantamos en cualquier evento con zapatillas, pantalón de deportes y ¡qué se yo!
Claro que lo difícil va a ser descubrir si esa velocidad se reduce a un cambio de imagen externa y la mona sigue siendo la de ayer, anteayer y siempre por mucha seda que ponga o quite. Porque siempre tengo mis dudas de aquellos que reducen sus ideologías a lo simplemente externo, porque para mi es claro que una cosa es "ser" y otra bien distinta "estar". Se puede estar en bañador o en pijama o en traje deportivo, pero lo fundamental es lo que en realidad hay debajo de ese atuendo momentáneo.
Para terminar, permítanme que sea pesado y vuelva a Joaquín Sabina para crear en mi un poco de esperanza e incluso ilusión: "Nos dieron las 10". Porque tengo cierto que las modas son pasajeras como lo es el invierno, la primavera, el verano o el otoño. Bien sabemos que: "El verano acabó, el otoño duró lo que tarda en llegar el invierno..." Sigo creyendo que la cordura, la educación, el saber estar y las formas dignifican a quien las tiene y honran a la sociedad. Y hay cosas que, por mucho que algunos las nieguen, siguen siendo siempre positivas. Puede cambiar el estilo de un pueblo, pero su ancestral cultura o se respeta o mucho me temo que el recorrido de esas ciencias y esos tiempos sea muy corto.
