Opinión

Ha ganado el populismo

En contra de los pronósticos de última hora - las 2 de la mañana, hora inglesa - llegaron los primeros ‘indicios’ de que hubo un vuelco al Brexit. A las 7 se confirmó la decisión. Ha ganado el movimiento lanzado por UKIP, partido ultra derechista de Nigel Farage que prometió devolver los puestos de trabajo a los ingleses y echar a los emigrantes. Así de simple fue su mensaje y ganó todo el sector industrial de los Midlands. Escocia, Irlanda del Norte y Londres optaron por quedarse. Eran, mayoritariamente los únicos. ¿Ahora qué pasa? Pues lo dejo ahí porque la reacciones atónitas comienzan en estos momentos y no soy quien para comentar; aun. Lo que puedo es analizar el efecto que tendrá a modo personal lo que ocurrirá con los británicos que viven y trabajan en el continente ya que nuestros compatriotas en la Isla han decidido mandar a freír churros a la Unión Europea. Como todos, hace años que participo en una red social de antiguos compañeros de trabajo en Inglaterra y durante los debates, algunos bastante agitados me sorprendió la división de opinión entre muchos colegas. Estoy hablando de ingleses jubilados como yo que han trabajado en el extranjero durante la mayor parte de su vida y sin embargo aún piensan que sigue existiendo el Impero Británico. Más de una vez he tratado de averiguar qué medios de comunicación suelen usar y si alguna vez se han preocupado en ver o leer lo que se dice en otras partes del mundo, no solo de Europa pero del resto del mundo de habla inglés. Es lógico que al vivir en España la mayoría de mi propia información procede de aquí y obviamente veo al Reino Unido con ojos españoles. Sin embargo, al ser bilingüe y tener acceso otra información como suelen ser del ‘Economist’ o del ‘Guardian’ y cadenas de televisión como CNN, Al Jazira e incluso la alemana creo poder opinar sobre todo este asunto de Brexit con una base más amplia de criterio. ¡Pero no; no hay manera! Unos cuantos me critican que estos medios están manipulados y yo que sé que otro tipo de comentario absurdo usan para poder arrebatar el ‘No’ y apoyar el ‘Si’. Supongo que así es la mentalidad humana que muchas veces no ve el bosque por culpa de la madera. Pues bien, ha ganado el Brexit. Aparte de las consecuencias políticas y macro-económicas mundiales que probablemente estarán en marcha, la mayoría de los ciudadanos que viven en el Reino Unido no se enterarán hasta mucho más tarde. Seguirán con su rutina diaria sea cual sea como si no hubiera pasado nada. Pero los que estamos en el extranjero, especialmente la UE lo notaremos de inmediato. Se acabó el privilegio comunitario como el libre movimiento que incluye empleo, derecho a voto en municipales y europeos y lo que es más importante la sanidad pública. Los departamentos de inmigración de los 27 pondrán en marcha un sistema de visados como cualquier otro ciudadano no comunitario. Aquí en España uno tiene que tener un empleo, un negocio o estar jubilado. Los primeros tendrán que renovar su estado de residencia y los jubilados estarán pendientes de los acuerdos entre las Seguridades Sociales que naturalmente tendrán que ser revocados. Esto es solo la punta del iceberg. Sumen a este follón las distintas reglas de juego que hay en cada uno de los países de la Unión Europea. No nos olvidemos de que aunque los ingleses han votado por dejar habrá un periodo de por los menos 2 años de negociaciones para poner en marcha un nuevo país extranjero en ojos de la Comunidad Europea. Esto es la punta del iceberg del complejo proceso de adaptación. Y repito, sin contar con los efectos secundarios geo-políticos y económicos. El Primer Ministro David Cameron presentó su dimisión para el mes de Octubre. De aquí en adelante…continuará. 

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