Opinión

Impresentable desafío soberanista

La declaración de Junts pel Sí y de la CUP para crear un Estado catalán independiente, supone un intento de golpe contra el ordenamiento democrático y un grave desafío a la convivencia en Cataluña. Dicho texto supone una clara vulneración al orden democrático establecido por la Constitución, el Estatut de Autonomía y el Reglamento del Parlament.
Que Rajoy no haya actuado antes, ni tenga una estrategia preparada para Cataluña, ha derivado ya, en un gravísimo problema en el que nos ha involucrado al conjunto de la ciudadanía de este País. Una vez más, ante la pasividad intolerable e injustificable  del presidente del gobierno y su pésima gestión en los últimos años de un grave problema del que todos éramos conscientes de su magnitud, no debería rematar con una suspensión de la autonomía, y esta, solo debería ser la última opción, porque significaría un fracaso de consecuencias impredecibles. Pero dicho esto sí que hay que demostrar a la sociedad que las leyes democráticas se van a cumplir y una buena manera de mostrarlo es con una actuación conjunta de todas las formaciones políticas democráticas.
 Formalizar un gran pacto nacional se hace imprescindible en el contexto político actual. Un gran pacto que debería girar sobre cinco inexcusables puntos: la defensa de la soberanía nacional que recae en todos los españoles, la unidad territorial, la Constitución como único marco, el compromiso con la integración europea y no gobernar de la mano de fuerzas políticas separatistas.
Un gran acuerdo para que, gobierne quien gobierne, la ciudadanía sepa nítidamente cuales son las líneas fundamentales de nuestra convivencia democrática y de la unidad sin fisuras ni grietas de España.
Espero por último que la negligente gestión del actual ejecutivo de la nación en las soluciones de los graves problemas de nuestro país se reconduzca de la mano de todos y todas y lo deseo así por nuestro presente y por el futuro de las próximas generaciones, para que este se desarrolle en un marco pacífico e igualitario de convivencia de los ciudadanos y ciudadanas de este País.Para que esto pueda ser así ,España necesita estadistas y nunca jamas políticos profesionales que únicamente se preocupan de sus interés personales poniendo en relieve todas las miserias humanas que han practicado en los últimos años a cuenta de una ciudadanía hastiada y asqueada de comportamientos impropios de los servidores de lo publico .
 

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