La Xunta ha colocado redes anticaídas en dos de los tres viaductos de la autovía de O Morrazo (A Moura y A Mó), que entró en servicio el pasado viernes. Es la primera vez que se habilitan estas medidas de seguridad en carreteras gallegas aunque no existe normativa sobre el uso de esas mallas de protección. En el primero de los viaductos no fue necesario porque las dos calzadas están en un único tablero y no hay ese riesgo. Se trata de una nueva medida de seguridad para evitar las caídas de conductores que salen de sus coches en esos tramos. Precisamente hace un año en A Cañiza se produjo uno de estos accidentes, un conductor tuvo un choque y salió del coche aturdido en plena noche buscando refugio en lo que creía que era una mediana, para evitar ser atropellado, encontró que lo que había era el vacío y se precipitó. En 2014 una viguesa perdió la vida en la VG-20 a su paso por Valladares al precipitarse desde un viaducto cuando evitaba ser arrollada tras un choque en cadena.
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Los viaductos de O Morrazo incorporan redes anticaídas
