El Museo do Mar abrió sus puertas para mostrar el pergamino más famoso de literatura medieval gallega, que en el primer día de exposición recibió unas 230 visitas y alcanzó febrero con las reservas de grupos escolares
A cuenta gotas, pero de manera casi continua, el primer día de “O pergamiño Vindel: un tesouro en sete cantigas” recibió cerca de 230 visitantes, 27 por la mañana, entre las 10 y las 14 horas, y unos 200 durante la tarde, desde las 17 a las 19 horas. Al coincidir en laborable, los organizadores ya esperaban una respuesta discreta la primera jornada, que sirviese de calentamiento para el puente, en que prevén mayor afluencia de público. La expectación ante la llegada del Vindel es máxima. Así, las solicitudes para reservar visitas guiadas de los centros escolares, tienen colapsado el teléfono y la web del Museo do Mar desde hace tres semanas. Las fechas para colegios están cubiertas hasta febrero. Si bien la visita al pergamino es gratuita, hay que pagar la entrada del Museo: 3 euros, la tarifa normal y 1,5 euros, la reducida para desempleados, estudiantes y jubilados.
El montaje se realizó junto a la sala de arqueología subacuática, con una capacidad máxima de 40 personas. El objetivo es mantener controladas de temperatura (20º, con dos grados de oscilación) y de humedad (50 ºmás/menos cinco grados).
Los primeros visitantes mostraron su emoción al encontrarse con el pergamino, así como su gusto por la exposición que lo arropa.
Alberto Taboada y Marta Llanos.
“Tenemos el facsímil de Moleiro y nos hizo mucha ilusión ver el auténtico”
Alberto Taboada y Marta Llanos acudieron a media mañana al Museo. Expectantes, salieron muy satisfechos: “Tenemos el facsímil de Moleiro y nos hizo mucha ilusión ver el auténtico”. Con respecto a la exposición, valoraron su tamaño y la elección de las piezas “son muy acordes al Vindel”.
Ignacio Hernández y Noemi Outes.
“Hay documentos muy interesantes y el ambiente está muy conseguido”
Ignacio Hernández y Noemí Outes visitaron la muestra con la pequeña Gaia, de 5 meses. “Sabíamos de la muestra y teníamos que venir ya porque regresamos a Palma”. Con respecto a la exposición aseguran que “hay documentos muy interesantes y el ambiente está muy conseguido”.
José Picano.
“El pergamino está muy bien contextualizado en su época”
A José Picano le gustó la exposición y el Vindel, aunque no le sorprendió. “Tenía información sobre el pergamino y es como lo esperaba”. Con respecto a la exposición, considera que ofrece una información muy completa: “Está muy bien contextualizado en su época”, indicó.
Marina Vilaboa.
“Volveré porque necesito más tiempo para verla con detalle”
Marina Vilaboa acompañó a una amiga a la exposición. “Se marcha a Pamplona, por eso venimos el primer día, pero yo volveré porque necesito más tiempo para verla con detalle”, afirmó Vilaboa, quien destacó la importancia de tener el pergamino en la ciudad.
Lucas Pérez y Elena Freire.
“Estábamos esperando a que llegase para venir de los primeros”
Lucas Pérez y Elena Freire disfrutaron cada momento de la exposición. “Estábamos esperando a que llegase para venir de los primeros”, aseguran. Su interés se centra en el pergamino dentro de la historia del idioma gallego. “Supone el comienzo de la lengua”, indican.n
Carmen Romero y Rafael Muñoz.
“Tendrían que poner autobuses lanzadera desde la Porta do Sol”
A Carmen Romero y Rafael Muñoz la exposición les cogió por sorpresa. “Vivimos cerca y estábamos dando una vuelta en bicicleta”. Encantados, destacaron el valor del documento. “La gente tiene que venir a verlo, tendrían que poner autobuses lanzadera desde la Porta do Sol”.
Elena Galván y Alfredo Castelo.
“Parece increíble que se haya conservado tan bien tanto tiempo”
Elena Galván y Alfredo Castelo son de Coruña y aprovecharon sus vacaciones para contemplar el Vindel: “Participamos en un congreso de poesía medieval en Fisterra y ahora esto; está todo relacionado; parece increíble que se haya conservado tan bien tanto tiempo”.
