vigo

La nueva Gran Vía albergará once rampas, una plaza y energía renovable

Abel Caballero y David Regades presentaron el proyecto  a directivos del El Corte Inglés, Javier Esteban, director regional; Ignacio Granada, director en Vigo y Pati Blanco, director de Comunicación y Márketing.
photo_camera Abel Caballero y David Regades presentaron el proyecto a directivos del El Corte Inglés, Javier Esteban, director regional; Ignacio Granada, director en Vigo y Pati Blanco, director de Comunicación y Márketing.

Favorecerá las entradas y salidas en el corredor mecánico que unirá los 650 metros de Urzaiz a Praza de España

La aplicación del proyecto “Vigo Vertical” en Gran Vía cada vez tiene una forma más definida. Así, ayer, el alcalde Abel Caballero y el concejal de Fomento David Regades mantuvieron la primera reunión con comerciantes de la zona para explicarles la actuación. “Será algo semejante al corazón de Nueva York”, apuntó el regidor en su presentación, en referencia al “High Line”, instalado en el lado oeste de Manhattan.
La primera aproximación apunta a una combinación de tecnología y naturaleza en la creación del nuevo espacio urbano. La conexión con los ejes transversales es una de las principales preocupaciones de los técnicos, por lo que  aunque mantienen los cuatros tramos principales del actual bulevar central, destinado a acoger la rampa mecánica que una el centro con la parte alta de la ciudad, estos estarán subdivididos en once rampas que faciliten la entrada y salida de la pasarela. Lo que en palabras del alcalde “le aportará porosidad” a la estructura.
Según el plan que en el que se trabaja, se fomentará la conquista del espacio público por la ciudadanía con la instalación de puntos de encuentro, zona de wifi libre y una gran plaza, con 60 a 100 metros cuadrados, en mitad del trayecto, entre la confluencia de Ecuador y la de  Venezuela. La actuación busca cambiar completamente el concepto del primer tramo de Gran Vía, centralizando su ordenamiento con la instalación de un conjunto escultórico de grandes dimensiones y una fuente ornamental. Las nuevas tecnologías estarán presentes siguiendo las pautas de las Smart City. A la red pública de conexión a internet se sumarán iniciativas como el aprovechamiento de la energía generada con las pisadas de los viandantes.
Aún quedan varios aspectos por conocer, entre ellos la distribución del tráfico y su posible solución a través de túneles que conecten las trasversales, tal y como se habló hace unos meses en la primera presentación de la idea.
Con la redacción del proyecto en marcha (se adjudicó en junio por 122.000 euros), se prevé que en el primer trimestre del año que viene esté finalizado, para poder licitar y contratar las obras durante el segundo trimestre. De cumplirse los plazos de  ejecución, en abril de 2019 la nueva Gran Vía será una realidad.

La infografía muestra el aspecto de Gran Vía una vez instaladas las rampas mecánicas en el bulevar.

La infografía muestra el aspecto de Gran Vía una vez instaladas las rampas mecánicas en el bulevar.

Caballero resalta el eje urbano entre Casco Vello, Príncipe, Urzaiz y Praza de España

 Abel Caballero destacó la importancia de esta actuación en la creación de un eje urbano entre el centro de la ciudad y la parte alta: “Es un nexo compactado que se prolonga desde el Casco Vello, por Porta do Sol, Príncipe, Urzaiz y Praza de España a través de Gran Vía y se engloba en el centro de la ciudad”, afirmó. 


La pasarela de Gran Vía pone en comunicación varios de los focos en los que prevé actuar el programa “Vigo Vertical”, conectando O Castro, con la estación del AVE o el entorno del antiguo hospital Xeral. La peatonalización de la Porta do Sol  se incluye en esta conexión en la que integra así al Casco Vello que se suman a otras iniciativas como las escaleras de II República o el ascensor de Juan Ramón Jiménez, ya realizadas o el ascensor en San Salvador, en proyecto. Además, estudia posibles ramificaciones en áreas más periféricas como Bouzas y el barrio de Teis. Como acciones paralelas se encuentran el desarrollo de las nuevas tecnologías, medidas respetuosas con el Medio Ambiente como el fomento en el uso de energías renovables.

Programa ‘Vigo vertical’


El presupuesto, aún sin cerrar, para la nueva Gran Vía se sitúa entre los ocho y los nueve millones de euros. Se engloba dentro del programa “Vigo Vertical”, que dotado con 18, 75 millones de euros, está sufragado por los fondos europeos Feder en un 80% (15 millones de euros) y en un 20% por el Concello (3,75 millones). “Esta fue la propuesta mejor valorada por Europa en el proyecto Edusi”, apuntó Caballero. Con distintas actuaciones en la ciudad, Gran Vía supondría el grueso del programa que se define a través de tres finales concretas: promover medidas en torno al concepto de Ciudad Inteligente, favorecer una urbe integradora y accesible, al tiempo que se comprometa con el desarrollo sostenible.

Te puede interesar