Opinión

León

El mejor escribiente echa un borrón y siete años de trabajo inmaculado se ve ensombrecido por un error mayúsculo. Lo reconoció el presidente de Correos, Javier Cuesta, ante el auditorio que le enmendó la plana cuando presentaba un sello postal dedicado a la ciudad de León en el que aparecía la catedral de Burgos. Algo imperdonable, porque la humanidad se divide entre aquellos a los que les gusta más la catedral burgalesa o la de León  y la gente tiene el corazón partío y sus afectos son  irreconciliables. O con Burgos o con León, pero no hay medias tintas. Correos ha dicho que va a reparar el desaguisado y que sacarán un nuevo sello con la catedral correspondiente, pero que no se van a retirar los efectos que ya están distribuidos. Si Fórum Filatélico o Afinsa estuvieran en activo y realizando sus fechorías, se dedicarían a acaparar estos sellos y quien sabe cómo los valorarían.

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