El sacerdote llegó a esta parroquia en 1981 y se jubila después de ejercer como misionero en varios puntos del continente africano y de España

Homenaje al cura de Trasmañó por treinta años de servicio

Waldo García nació en Vigo y descubrió su vocación a los 24 años.
Los vecinos de la parroquia redondelana de San Vicente de Trasmañó han organizado un homenaje a Waldo García Romero, su párroco durante 31 años. Por ello, se celebrará el próximo día de 23 septiembre un homenaje en su honor. Los actos comenzarán con una eucaristía en la Iglesia de San Vicente de Trasmañó que comenzará a las once de la mañana para, posteriormente, realizar un paseo en barco con visita a la isla de San Simón y se finalizará con una comida en un restaurante de Chapela.

Waldo García nació en de Vigo en el año 32,pero no sintió la vocación religiosa hasta los 24 años, cuando ya trabajaba en la Caja de Ahorros de Vigo, empleo que dejó para ingresar en el seminario de Viana do Castelo, para después trasladarse hasta la capital portuguesa y viajar a Roma para finalizar sus estudios religiosos.

Posteriormente, desarrolló su ministerio en los Misioneros Espiritados, con los que viaja hasta a Ángola y Camerún, donde cuentan con misiones. Será durante la estancia en estos países cuando Waldo conozca en primera persona la guerra, lo que le llevan a intentar ayudar a las víctimas de estos conflictos, como el que desangró durante más de tres décadas a Angola. Su compromiso con los más débiles le obliga a huir de África y regresar a España escondido en un mercante como polizón. Ya en territorio español, sigue con su actividad misionera como máximo responsable de esta misión en poblaciones como Aranda de Duero, Barcelona y Madrid.

Por lo avatares de la vida, regresó a Galicia en Valeixe , en el municipio de A cañiza, dónde adquirió una vivienda con el objetivo de continuar con su función de Los Misioneros Espiritados, ejerciendo también párroco del lugar.

En el año 1981 llegó al ayuntamiento de Redondela, convirtiéndose entonces en el párroco de San Vicente de Trasmañó y de Cedeira, hasta hace unos meses en que se jubiló definitivamente. Ahora sus parroquianos quieren rendirle un homenaje por todos estos años de servicio y dedicación. n

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