Creo que en general la mujer moderna no lee esos libros de auto-ayuda que se editan con aspecto de refranes, dichos, proverbios, sentencias o paremias. Este vocablo, significa refrán, proverbio, adagio, etc.. Mi siempre respetada María Moliner hizo, con la colaboración de sus equipos, el “Diccionario de uso del español”, confeccionado con sabiduría. Y además sin la mordaza que puede suponer firmar unas acepciones, en un libro de consulta con la marca o identificación de la Real Academia Española.
Para Moliner, “paremia” procede del griego “paroimía¨, que es “proverbio”. Y añade significados: “Sentencia o refrán” y algún otro. Iguales en el fondo, pero no en la forma, ya que doña María era docta por todos los poros de su piel; tanto o mas que algunos académicos de la Lengua, al lado de los cuales no dejaron sentarse a esta mujer nacida en la provincia de Zaragoza. Desde 1981 está rodeada de ángeles que saben diferenciar en el uso entre la uve y la be, y aun mas, están al corriente de la utilidad de la hache, por mucho que no se pronuncie.
En Vigo los que nos rodean son los ourensanos. De ellos tuvimos a Eligio, el tabernero mas popular entre los de su gremio en la Oliva. El mismo atendía el negocio con su esposa, Lolita de nombre, y una empleada que no recuerdo como se llamaba, que decia corcretas o crocretas , a las croquetas. En Vigo se extendió hace un quinquenio, aproximadamente, que la fámula o criada, en lenguaje coloquial, que ella, la de la taberna de Eligio, estaba en lo cierto, que las dichosas corcretas o crocretas eran legales, porque este vocablo se empleaba en muy remotos parajes hace la tira de siglos, según decían los académicos. Recurro a la propia RAE y no hay pista de que su personal bien preparado haya llegado a eso, a dar por buenas las viandas de la muchacha de Eligio. Decirlo, además, delante de mucha gente del común pero estudiada.
Ellos, los del dicho machista, si que se visten la boina por los pies. Pieza que aparece en cuanto ves retratado al “Impío don Pío”, que de ese modo calificaban a Baroja. Pues que si se nos ocurre no acudir a la demografia, sino a visitar los las facultades de España, por ejemplo Derecho o Medicina, en las que a simple vista hay muchas mas estudiantes mujeres que varones. Los barones se quedan para la aristocracia y para los partidos, sean de casta o sin ella.
Si hablamos de machismo, ayer miércoles a la noche, hoy jueves para usted, empleando diversas fuentes y desde el País Vasco, nos ofrecen una estadística, con el dato de que en lo que va de 2017 ha habido una mujer asesinada. En 2007 fueron 71 las víctimas y en 2015, 64. No se puede decir que van mejor los datos, cuando se registre un solo acto de violencia machista.
Se constata que en España se habla en refranes, y habrá que creerlo porque dicen algunos que en nuestro rural se hartan de decir paremias, aunque no sepan lo que significa, así como dichos, máximas, adagios… Creo que se oye mas, que se escuche es otra cosa, lo de “Yo me visto por los pies”, que dicen uno y cien fulanos. negando la posibilidad de que ellas hagan lo propio. Quienes sostienen tal afirmación, además de machistas son gilipollas. Las mujeres ¿acaso tienen que ponerse por la cabeza los zapatos, incluso los pantalones, o las braguitas ?
En España, según estudios solventes y criterios sensatos, los hombres somos el 49,1º % y las mujeres el restante 50,90 %. Los que presumen de vestirse por los pies, además de machistas son ignaros, por si ellos no lo entienden, acabo de llamarles ignorantes. Y no les recuerdo el Himno Gallego, porque los calificativos serían mas y mas contundentes. Na lingua do meu Curros, que prefiro por “riba” de todos.
Recordarán ustedes lo que aquí comentamos, que el “Seat 600” había sentenciado a muerte las gabardinas, porque con los utilitarios y el poco tráfico que había en Vigo, como en España, podías plantarte en la misma puerta de la panadería sin mojarte ni una gota. Ahora sucede algo semejante con la chaqueta o americana, la de vestir. . Desaparecen mas o menos a la misma velocidad que los zapatos de siempre, ahora deportivos, de lona o que las corbatas, que quedan para los que tienen el mal gusto, a los suicidas me refiero. Gente de bien hacer le echó poesía a eso de autolesionarse, Alfonsina Storni entró lentamente en el mar –la mar dicen muchos del os que viven de ella- ; Ángel Ganivet se sumergió en un río de Europa del Norte y Larra, “Figaro” acabó con su vida en su propio domicilio.
Hay prendas que nos distancian a los viejos, hermosa palabra, de la gente joven, que ahora caminan con la juventud en el hombro hasta los sesenta, si no superan ese tope de edad media. Los de mi quinta y próximas por arriba, somos como ellos, pero lo nuestro se escribe con mayúscula: Edad Media. Algunos aun dejan a la señora de casa con el cinturón de castidad y la llave echada, mas o menos como los cruzados, no es que cruzaran nada, se iban a las Cruzadas Cristianas.
La pregunta del titular, ¿Cómo se visten ellas por los pies?, tiene una respuesta: como les de la gana.