Cartas al director

Dificultades en el estudio

Un niño, un adolescente o un joven en la escuela, en el instituto, en la facultad, se encuentra, en muchas ocasiones, con el tremendo inconveniente de que hay que estudiar. Esta palabrita parece ir perdiendo su significado debido a la falta de práctica. Es definida por el diccionario de la Real Academia Española como "ejercitar el entendimiento para alcanzar o comprender una cosa".
Actualmente, aprender a estudiar es una asignatura pendiente para todos nuestros niños y jóvenes. En muchas ocasiones oímos expresiones no correctas sobre el trabajo de nuestros hijos: “No tienen voluntad y nunca llevan la tarea hecha”, “estudian mucho, pero no sacan rendimiento al tiempo de estudio”, “se distraen tan solo con una mosca”, “le cuesta mucho concentrarse y pierden el tiempo”. Todas estas manifestaciones son las que cualquier padre tiene en la cabeza, cuando su hijo no obtiene buenos resultados académicos y sufre de fracaso escolar. Esto no solo tendrá repercusiones en la formación y futuro laboral del hijo, sino que será detonante de discusiones en el hogar familiar, pero, se podría hacer una pregunta, ¿Sabe mi hijo estudiar? ¿Es mi hijo feliz? ¿Está sufriendo por no sacar rendimiento de su estudio?
Los ingredientes para sacar buenas notas están en todos los seres humanos, solo hay que activarlos. 
Hay tres premisas básicas: Motivación, Autoestima y Método. Lo importante es ayudar al alumno a confiar en él, en su capacidad, teniendo en cuenta que primero está la confianza y luego el compromiso.
Cualquier alumno, dicen los expertos, puede sacar buenas notas si está motivado, tiene autoestima y le enseñan los pasos para lograrlo.