Cartas al director

Mucho ruido

 En los tiempos que corren hay que pisar el acelerador para poner a cada partido en el pedestal que le corresponde.
Dicho esto, pasemos a la acción. El PP y su portavoz Casado están haciendo el ridículo más espantoso; ya que éste último ignorando la dialéctica propia que un político debe tener, se precipita con alocuciones impropias de un ser humano, y por lo mismo no ser bondadoso y cariñoso. Ha insultado a la oposición con miramientos innobles decadentes, que están ahí para rescatarlos del olvido. No se puede ir así por la vida, llamar traidor al oponente no es de recibo, y pasa la línea roja de una conducta comedida faltando al respeto. Pero no sólo esto raya con el fascismo, tan triste como indeseable, violando el “Statu Quo” vigente.
El partido que defiende está podrido por la corrupción de tomo y lomo, en la que muchos de sus dirigentes están próximos a citaciones y juicios que no son o no dejan de sorprendernos y todavía más graves que la aventura a la que nos someten los secesionistas.
Como no, está sujeto a un proceso por su máster. Es una ignominia que veremos como la resuelve y la acata.
En cuanto a Rivera, se le ve el plumero y está actuando como un fascista; que yo veo como un discurso no distante del señorito. A mi no me convence y recurro a la inteligencia para destapar su palabrería demagógica y, también su portavoz que no tiene pelos en la lengua a la hora de valorar las instrucciones de su jefe. No seas verdugo de tus intenciones inopinables inviables “in extremis”.
Por lo que se refiere a Sánchez decir lo mucho que hizo por mejorar la salud del país en el poco tiempo que dispuso para acometer su gobernanza. La oposición no le brindó el apoyo suficiente para llevar a cabo medidas de todo tipo dirigidas a paliar la política asumida por él y sus ministros. Lo peor de todo fue no conseguir la aprobación de los presupuestos en el Congreso de los Diputados. Lideraron reformas jamás contempladas por los gobiernos anteriores.
Todos sus ministros trabajaron con ahínco para darnos luces, que no permitieron los del PP, C’s y otros. Aquí está la verdadera disposición en contra de lo que hubiese sido un logro importantísimo en calidad y cantidad. Pero muy bien podrían en el futuro continuar con su mandato interrumpido por las bestias electoralistas, populistas, reaccionarias, y lo que quieran añadirle.
“Spend your life like you want, but not play with your health”