Cartas al director

tibia reacción de la onu

Parece que, finalmente, la ONU ha puesto en marcha una vasta operación para socorrer al medio millón de cristianos y yasidíes perseguidos por los terroristas del autoproclamado Califato Islámico. Se trata tan solo de llevar tiendas de campaña, mantas, agua y medicinas a esa inmensa muchedumbre que solo aspira a volver a sus hogares y recuperar su forma de vida, un clamor que no puede atender la ONU. Las últimas informaciones conocidas indican que el Estado Islámico cuenta con 15.000 terroristas, llegados de diversos puntos del mundo, Europa incluida, equipados con el moderno armamento norteamericano que abandonó el ejército iraquí cuando huyó de Mosul. Se une a ello la incapacidad de este ejército para desalojar a los terroristas y la decisión de las potencias occidentales de no intervenir más allá de los bombardeos selectivos dispuestos Obama. No deja de ser una tibia acción. Así estamos.