Cartas al director

Pablo Casado y su difícil tarea de unir y convencer

 Y devolverle la confianza a los cinco millones de españoles que dejaron de votar al PP en los últimos años. Ello no será tarea fácil, pero tampoco imposible, y si nos atenemos a sus primeros pasos, que atinan en la dirección correcta, la que reclamaban desesperadamente las bases ideológicas del partido y encontraron eco en el Congreso reciente que lo auparon a la presidencia del mismo, hoy solo nos queda apoyarlo y ayudarlo en su tarea de limpiar el partido de aventureros y comerciantes de la política, que tanto daño causaron en nuestras filas, unos con sus corruptelas y compadreos inaceptables, otros como cooperante necesarios de esas tropelías. Tal vez, Mariano Rajoy en su obsesión por la economía descuidó lo político... Y fue aquí precisamente que centraron su trabajo los "fontaneros invisibles..." ingresados de contrabando en nuestra organización, con disfraz de independientes, y que, de "centro derecha", en realidad, ni lo uno, ni lo otro, pero sí todo lo contrario, para destruir desde sus entrañas a nuestro partido, el que hoy lucha por su unidad y solvencia para convencer de nuevo a todos los españoles...
Quién no recuerda el silencio transmitido a las bases del PP sobre el desastre heredado de Zapatero, mientras el PSOE hacía caída y mesa limpia con los ajustes necesarios e indispensables para recuperar lo perdido, entre ello estaban la economía, las preferentes y subordinadas, como parte negativa de la herencia, o el rescate de las cajas de ahorro, casi todas en manos de jerarcas socialistas que despilfarraron y fue un foco de corrupción mil millonario, pero sin mucho eco de la jauría mediática progre. Paralelamente se hicieron pactos de Estado vergonzosos, con Rubalcaba y Zapatero, para blanquear a ETA y llevar a sus verdugos a las instituciones del Estado, mientras sus víctimas eran abandonadas a la buena de Dios. La mayoría absoluta de 184 diputados para nada sirvió y pasó desapercibida para los ciudadanos que nos votaron, mientras observaban despavoridos el aval y silencioso que se le entregó a Zapatero para su lobby en la Unión Europea a favor de Cuba y la revolución chavista. A la primera para sacarla de la lista de países terroristas cuando allí seguía y sigue funcionando hoy la meca del mismo, con las ramificaciones creadas en toda América latina con el seudónimo del socialismo del siglo XXI, pero que realmente es el centro del nuevo comunismo. Todo ello era protegido por los buenos oficios de Zapatero y su Alianza de Civilizaciones que a día de hoy nada sabemos los españoles de su coste y el para qué fue creado, ¿sería proteger a los yihadistas? Sus obsesionantes y extravagantes intenciones de trasladar aquel bodrio revolucionario a España fueron preparados durante sus años de gobierno y los subsiguientes con muchas complicidades del PP. Avalando su nefasta aventura de mediador en Venezuela. Ocultar este bagaje de despropósitos nos llevó a los españoles a caer en sus macabros deseos revolucionarios, que ya tienen hoy nombre y apellido sus ejecutores, Pedro Sánchez y Pablo Iglesias, están en su primera línea de lucha y cuentan con la ayuda de separatistas catalanes, vascos y las respectivas mafias que ya tienen hoy su cuartel general en España, lo que nos obligan abiertamente a su combate democrático y plantarle cara con un PP fuerte y unido bajo la bandera de sus valores fundacionales, ideológicos, morales y éticos, hoy extraviados o perdidos, que hay que rescatarlos cueste lo que cueste. No hay otro camino, si de verdad queremos hacer algo por devolverle la confianza e ilusión a millones de españoles que en su gran mayoría son de derechas y añoran que el PP vuelva lo más pronto posible a gobernar. Pero eso sí, con nueva estrategia y líderes capaces para convencer y cumplir lo prometido, plantando cara al adversario y sin rehuir la discusión democrática en la calle, de nuestros programas de gobierno, que bien administrados producen resultados satisfactorios para toda la ciudadanía. Esto no es un relato, es una realidad contrastable.
No es hora de lamentos, pero sí de poner el foco sobre los errores para no repetirlos. La primera prueba de fuego son las elecciones Municipales venideras, donde no deberán repetir quienes fracasaron en el pasado reciente, unos por corruptos y otros por vender el partido al adversario o mejor postor con inaceptables componendas que seguimos pagando hoy con su "cara de yo no fui", pretenden repetir la cruzada de una limpieza corrupta no debe de tener tregua y menos cuartel. Manos a la obra hoy, compañero Casado, mañana quizás sea tarde para ello.
Kondra Adenaguer decía: En democracia no sobra nadie, se excluyen de la misma quienes traicionando sus juramentos y obligaciones se creen superiores y toman atajos inadecuados para secuestrar conciencias y confundir a los ciudadanos. Solo para llevarlos al abismo más cruel y destructor de sus esperanzas..