Cartas al director

los cien días de cortesía anuncian angustia y pesadilla

 Causando hoy gran decepción en toda la ciudadanía, que ya sienten en carne propia cuales son las prioridades de los nuevos profetas del desastre, camuflados en mareas blancas o negras de la marca Podemos, todos alejados de los ofrecimientos que hipnotizaron y engañaron a mucha gente. Así secuestraron esperanzas y votos. Priorizando su resentimiento ideológico, lleno  de odio y rencor pero vacío de realidades tangibles y que hoy afectan a los ciudadanos, dándoles así la espalda a una sociedad que los educó y crió sin complejos. Descubrimos efectivamente que su asalto está en marcha. Cuyo destino es, destruir lo conseguido, los últimos años de convivencia, progreso y bienestar social. El que hoy todos estamos disfrutando.
Y donde los dos grandes partidos se juegan su porvenir y España entera, su futuro , como nación unida, libre y democrática. En este próximo diciembre, con las elecciones generales hoy al acecho, tenemos dos ingredientes muy peligrosos, la amenaza separatista y la cobardía de una izquierda fragmentada y anarquizada, una rama ya radicalizada opta por el nuevo comunismo y se disfraza como socialismo del siglo XXI, su buque insignia político es Podemos. Aparentan estar unidos en el fin pero discrepando ideológicamente en las formas, y es aquí precisamente donde surge un nuevo partido que dice ser el centro, Ciudadanos, pero sin decidir si es de derecha o izquierda. Solo avisan que quieren una profunda y clara regeneración política, precisamente a esto  es  a lo que se niegan los dos grandes partidos, PSOE y PP, a pesar de saber que ello facilitaría el retorno a casa de alejados y enfadados que ya son millones y ya amenazan con repartirselos Podemos y Ciudadanos. El aviso de Cataluña no es tomado en cuenta y crea más incertidumbre.
Sabemos que fueron muchos los errores y corruptelas de los que no se libran PSOE  y PP, pero no olvidemos los aportes y sacrificios hechos en su día que dieron paso a la transición del 78, origen y sostén de la democracia que todos disfrutamos. Cuidarla y fortalecerla debe ser hoy nuestra prioridad con las leyes en la mano y aplicándolas con rigor y fidelidad. Quienes hoy pretenden asaltarla para destruirla lo hacen contra nuestra forma de vida y convivencia democrática. Ello debe comprometernos a una reflexión sin matices de conveniencia. Aquellos países que ya probaron todas sus bondades destructoras, hoy están secuestrados por la miseria y languideciendo sus libertades democráticas. Trabajemos juntos para evitar que el contagio llegué a nuestra querida España.
Cuando la hipocresía se viste de olvido aparece el doble camino surgido de la crisis helena. No es la tragedia de la comedia sino un giro al teatro de lo absurdo que ya eligió la extrema izquierda y su Podemos para desarrollar en nuestro país. Los avisos exhibidos en Venezuela y Grecia que ya puso en alerta a quienes le dieron el voto a Podemos y sus mareas blancas el 24-M, hoy ya son muchos los decepcionados y preocupados, fueron traicionados. Sus prioridades, para nada son aquellas que desataron la euforia y esperanza en los ciudadanos, lo económico y social. Ellos lo cambiaron todo por el resentimiento, acosado de odio y rencor para llevarnos al pasado. Ya amenazan con destruir nuestra convivencia actual . ¿Lo consentiremos los españoles?
Así nos ofrecen hoy la valentía de la desesperanza, cómo llegara más lejos que Mandela sin convertirse en Mugabe. A esta triste y tenebrosa realidad nos exponen estos iluminados que no solo fracasaron en Cuba, Venezuela, Grecia y hoy en Portugal sólo nos queda trabajar juntos en España para que el 20 de diciembre triunfe el sentido común sobre los aventureros del todo vale para llegar, ayudados por la confusión que propicia un PSOE y su cabeza visible Pedro Sánchez cada día más confusos y distantes de la realidad nacional.