n n n No es casualidad, es una realidad contrastable que denuncia públicamente lo que hoy escenifica una parte de la izquierda española, capitaneada por Podemos y sus mariachis con un sin número de cómplices anónimos, que se niegan a condenar y conjuntamente guardan silencio y protegen aquel régimen totalitario que viola los derechos humanos, empobreciéndolo y llevándole a la miseria y conflictividad social que hoy vive Venezuela, que, en apenas quince años, ya lo sumieron en la ruina económica, social y política, bajo el secuestro ideológico, económico y político, que los hermanos Castro y la revolución bolivariana de Chávez instalaron. Y hoy Maduro intenta perpetuar reprimiendo salvajemente mientras en Europa y España en particular, siguen aceptando sus desbarres peligrosos, tratando de ver para otro lado, o fingiendo lo que no sienten. Ello conspira abiertamente contra nuestros intereses nacionales, y los de cientos de miles de nuestros emigrantes y sus descendientes. Ayer en Cuba y hoy en Venezuela
Con el mismo guión revolucionario, impuesto por Cuba y los hermanos Castro, la historia se repite como decía Marx. Unas veces como tragedia y otras como farsa. La primera ya se escenificó en cuba los años sesenta y fue una tragedia para el pueblo cubano y nuestros emigrantes allí instalados, pero no pasó nada y todo pasaría al olvido. Hoy se repite en Venezuela como farsa de la nueva extrema izquierda y poco, o nada podemos esperar cuando la política exterior de nuestro gobierno como lo demuestran los hechos actuales, la dirige en la sombra el sr. Zapatero, el mismo que dejó el país al borde del embargo y una conflictividad social y política por el diseñada y entregada, como herencia de fiel cumplimiento, al PP. Y como albacea para tal fin a Pedro Sánchez y su incondicional aliado, Pablo Iglesias y su Podemos para todos juntos, contra el PP, revivir pactos como el de Tinel y otros ocultos convenientemente que ya hoy afloran para dar paso al nuevo Frente Popular que pretende revivir las atrocidades del pasado. Y trasladarlas al presente ignorando que ya fueron derrotados para buscar venganza.
Así vive hoy el PP, sus coletazos y Mariano Rajoy es su víctima mayor. Mientras los casos emblemáticos de corrupción y pillaje, superiores en escándalo y cuantía como los ERES de Andalucía, caso de los Puyol, o las quiebras fraudulentas de cajas públicas y otros, paralizados judicialmente y sin explicaciones a la ciudadanía.
Hoy Europa y España en particular viven un momento muy difícil, donde el chantaje de una extrema izquierda desbocada, infecunda y miserable como las mulas, como decía en su libro mi amigo el poeta L. Pastori. Que solo son útiles para difamar, u ocultar según convenga a sus intereses. Así ayer utilizaron la bendición del Papa Francisco y Obama, para proteger la narcoguerrilla colombiana y la revolución cubana y sus novedosos aliados, para la confusión los artesanos de la paz, donde está ubicado y en primera línea, Rodríguez Zapatero, Podemos, Eta y otros muchos cómplices que ya lograron sacar a Cuba de la lista negra de "países terroristas", a sabiendas que es allí donde está el santuario de Eta y funciona el comando estratégico de lo que hoy sucede en Venezuela para someterla y secuestrar su democracia y pretender repetir en España hoy, con Podemos y su trabajo inquisidor propio, utilizando la supuesta corrupción del PP, y ocultando con un camuflaje distorsionador y traicionero la de su cómplice. Cuanto me recuerda hoy aquellos tristes episodios, vividos en Venezuela, los noventa con acusaciones mutuas entre Copei y Ad, y sus corruptelas, dándole a Chávez y su pandilla, carta de nacimiento y patente de corso, fue la soberbia, unida a la opulencia mal habida y peor manejada quien les impidió una oportuna reflexión regenerativa conjunta que hoy todos los venezolanos lamentan. Ojalá no se repita esto en España.
La visita del canciller cubano portando invitación para visitar Cuba, el Rey y Mariano Rajoy, suena a chiste de mal gusto y contradictorio, con la que está cayendo y sus provocaciones en marcha. Sr. Presidente sin más rodeos, llegó la hora de revisar cuidadosamente quien o quienes le están metiendo, gato por liebre dentro y fuera del PP.
