Cartas al director

seguimos sin convencer a los españoles, sr. presidente

n  n  n Y ello es preocupante, ante su gran trabajo, encomiable y prudente, para rescatar la maltrecha y casi arruinada economía de nuestro país, lo que, el mundo globalizado y democrático, le reconoce y expone hoy como un ejemplo a seguir. Nos faltó el relato político, franco, sincero y oportuno en la estructura de nuestro PP, para convencer a nuestros compatriotas, explicándoles los sucedido, del cómo y por culpa de quién habíamos llegado al borde del abismo. Ello le permitió a los culpables y sus cómplices en la sombra, irse de rositas. Así los tenemos hoy, envalentonados y mintiendo descaradamente con la esperanza que alguien le crea y compre sus desbarres, corruptelas y mentiras, ofreciendo lo que no es suyo o tiene una dudosa procedencia para buscar su fin. Devolvernos al tenebroso pasado, este es el reto que se le presenta hoy a a nuestro PP y lo obligan a salir a la calle para defender su gobierno y confrontar nuestras ideas y postulados ideológicos sin complejos y cobardías. Los que hoy parecen extraviados momentáneamente. Tal vez, olvidamos aquellas palabras bíblicas de "No solo de pan vive el hombre".
Llegó la hora de la verdad para nuestro gran PP. La historia de su fundación está llena de sacrificio y concesiones oportunas para hacer un gran partido de derecha y referente nacional de un sentir mayoritario, lleno de matices convergentes que nos llevó a consolidar ese centro derecha, que con orgullo  exhibimos hoy. Pero está en peligro. Nuestra prudencia y perseverancia fue mal utilizada en los últimos años. Usted, ha hecho méritos suficientes par su rescate. Lo que aprovecharon, de forma indebida, sin escrúpulos y aventureros que penetraron nuestras filas para sembrar la cizaña con su corrupción e indiferencia, ello creó en nuestras filas, complejos y cobardías, que utilizaron como fieles compañeros de viaje, para esconder o negociar nuestros principios, valores y postulados ideológicos. Contaron para ello, con la mirada perdida de muchos y connotados dirigentes, que se convirtieron en cómplices o alcahuetes de sus fechorías. Algunos ya están hoy señalados por la justicia. Ello amerita una auténtica revolución regenerativa en nuestras filas, caiga quien caiga. Este via crucis, que vivimos hoy, fue aprovechado por nuestros adversarios políticos para muy sutilmente utilizar el lenguaje extremista y populistas que Maquiavelo diseñó, para llegar, sin importar el cómo y para qué. Así dieron inicio a esta campaña de acoso y derribo contra el PP, que fue secundada por una jauría mediática que tiene su centro de operaciones en algunas Tv, cuyos periodistas sin recato alguno utilizan, mañana, tarde y noche, su deporte favorito (de acoso y derribo al PP). Y fingen sus dueños ser amigos de connotados dirigentes del PP. Con amigos así, ya sobran los adversarios políticos, Sr. Presidente.
Los desafíos extremistas y separatista, que vive España hoy, ya amenazan nuestra unidad territorial y nuestra democracia. Ello nos obliga a cerrar filas para dar una respuesta nacional, clara, contundente y oportuna por parte del Gobierno y todos los actores políticos y democráticos. El desmarque o equidistancia, no solo nos situará al margen de la realidad, la Constitución y sus leyes, y pueden ser catalogados por la ciudadanía, como una traición a la patria, y eso sería muy grave. La firmeza del Gobierno, no puede limitarse a sondeos, o encuestas que ya sabemos lo que dan de sí, y esta última, esconde a un cocinero distraído o en la luna explorando. Lo que es contradictorio y negativo, para el PP, que deberá abrir un debate serio y responsable en sus filas, ya que, cuando el río suena, es que piedras trae y prevenir, siempre será mucho mejor que lamentar, Sr. Presidente.
Lo decía Winston Churchill. La respuesta hoy, no la tiene la izquierda. El socialismo es la filosofía del fracaso, el credo de la ignorancia y la predica, de la envidia. sus efectos más eminentes y perversos son la fabricación y distribución, de la miseria.