El pasado 27 se celebró en un céntrico restaurante, la cena de los que fuimos pioneros en los años 62 a 1965, de aquel magnífico equipo Rápido de Sabarís, cuyos colores a rayas amarillas y negras.
El encuentro fue señalado para las nueve y media de la noche, no admitimos la televisión, pero sí a la reportera y fotógrafa de Atlántico. El encuentro fue reñido. Para el calentamiento comenzamos con unos sabrosos entremeses sin faltar un buen jamón con melón y un buen pulpo. Luego hubo un pequeño descanso , y ahí empezó lo fuerte. Más tarde, un pequeño descanso para los postres, unos cafecitos y los correspondientes chupitos. Un tiempo dedicado a los discursos y después a quemar calorías. Alguno tuvo que pedir sustitución, pues ya con el tiempo agotado y con empate, tuvimos que recurrir a penaltis.
Los más de 60 comensales, hombres y mujeres y con el tiempo encima, el entrenador mandó atacar, fue ahí cuando el grupo Club Naval (que días pasados había actuado para el Rey en Combarro) sacó todo su repertorio para rematar a las tres de la mañana.
Pienso que todos estuvimos a gran altura. Los organizadores, Juan Manuel el boticario y su dona, Paco Varela, Paulino Rial, Tito Domínguez, los fenómenos Suso Besada, Luis o Baiona, Ramiro, Puskas, Vilar, Manolo Flecha, Jesús Rivera, Manolo Manso, Lito Pino y alguno más, y no puedo dejar atrás al gran bailarín Luis Besada, que nos dio un recital pero de baile.
Deseamos que pronto no seamos solamente 60 personas, pues aseguro que el próximo año vamos a ser más de 100 personas las que acudamos a esta xuntanza del Rápido de Sabarís.
