n n n Días pasados escribía sobre este Santo Franciscano del convento de Vilariño de la parroquia de San Pedro de A Ramallosa. Varios vecinos me pidieron algo más de este religioso que dejó huella en la comarca del Val Miñor.
El padre Luis, nacido en Serra-Lisboa, el 18 de octubre de 1871 vistió el hábito de la Orden en 1884, y fue ordenado sacerdote en 1896. En la Orden Franciscana fue maestro de los novicios que acudían al convento de Vilariño, fundó la Primera Juventud Antoniana de España, primeramente en Gondomar, donde los frailes tenían su residencia en el propio pazo del Conde de Gondomar, para poco más tarde pasar a residir en el monasterio del convento de Vilariño. La Juventud Antoniana se fundó en el año 1903.
De la vida del Padre Luis se habla mucho, pues fue un gran valedor para toda la comarca miñorana. De todas estas virtudes que tenía, y de las anécdotas que ya comenté, hay también una que llama la atención.
En una ocasión, paseando con el doctor Don Latino Salgueiro, médico titular de Gondomar, unos muchachos estaban robando fruta de la finca del convento, estos al ver al Padre Luis, huyeron, pero oyeron una voz que les decía, acercaros y recoger la fruta madura, estos se postraron de rodillas y bajaron la vista, besaron el cordón y según dicen las gentes del lugar que estos experimentaron una felicidad enorme que fue muy comentada. Tendría que seguir comentando más cosas del Padre Luis del Patrocinio Apóstol del Valle Miñor, que falleció el año 1952, y fue enterrado en la capilla del monasterio de la Orden, en Vilariño de A Ramallosa.
En este convento se celebraban los primeros domingos de cada mes, el día de los Antonianos.
