Cartas al director

el separatismo no es cristiano

n  n  n ¿Cómo se puede entender que la mayoría de las personas que se manifiestan en Cataluña solicitando la separación sean jóvenes? La juventud necesita algo en que creer, algo por lo que merece la pena luchar, algo por qué vivir y esto también sirve para las personas mayores. 
A mi entender lo que ocurre es que la Iglesia Católica de forma casi general, se ha desacralizado, ha quitado a Dios y en su lugar a puesto al hombre. El sentido de lo divino, de lo sagrado, de lo trascendente, prácticamente ha desaparecido y las personas han perdido la fe. La mayor gravedad está en la desacralización de la Divina Eucaristía, que es la presencia real y viva, no una falsa ilusión, de Cristo, Hijo de Dios, el cual para mostrarnos su amor, murió crucificado para librarnos de la esclavitud del pecado y hacernos personas libres, no con la falsa libertad que ahora se pregona y, por si fuera poco para demostrarnos su amor, quedó vivo y presente en el sagrario. ¿Va a quedar infecundo tanto dolor, sufrimiento y humillación? No se puede dar la comunión en la mano, lo divino, lo sagrado no puede andar de mano en mano o caído por el suelo, eso conduce de una manera irremediable a la pérdida de la fe de los fieles en la presencia real de Cristo en la Eucaristía. 
Es duro pero tengo que decirlo; en varias ocasiones me he dirigido a los obispados de España, solicitándoles la anulación de la comunión en la mano; ni tan siquiera se han dignado un acuse de recibo. No sirve engañarnos, esta situación de desacralización sino se corrige, es el signo que falta, unido al paroxismo que reina en la sociedad de la inmoralidad y degradación sin precedentes, que confirma el final de esta era, el Fin de los Tiempos, que no es el fin del mundo, sino inicio de una nueva era que será de una espiritualidad como nunca ha existido, pero para eso, es imprescindible una purificación previa.