Cartas al director

Marisquiño

 Pues sí, dilectas leyentes: 
¿Os habéis fijado como está el pavimento junto al mar desde la Praza da Estrela hasta la Estación Marítima? Aunque valladas, las tablas se ven. Maderas levantadas y losas rotas o hundidas. Personas que vamos por allí a hacer footing o caminar, nos hemos dado mas de un trompazo.
Delante del Náutico se organizan verdaderos lagos en cuanto caen cuatro gotas, porque los sumideros jamás se han limpiado. En ellos han crecido hasta hongos.
El Marisquiño se siegue haciendo año tras año y con ello, el pavimento se deteriora más. Sin embargo, se están humanizando calles que ya habían sido humanizadas hace poco, como María Berdiales. ¿Etendéis esto?
¿En vez de humanizar la zona? Por qué no se repara el suelo del muelle? Y por qué no se hace el Marisquiño en otros lugares abiertos en vez de estar todo tan amontonado y apretujado? Tenemos Samil, Bouzas, Alcabre, sitios de gran espacio o atalayas como El Castro, La Guía, La Madroa, por poner unos ejemplos. Preguntadles a los vecinos de la zona del Náutico sino se echan a temblar cada vez que se acerca la fecha del famoso Marisquiño. Estos están hasta los cataplines de aguantar las mismas molestias todos los años. Y lo peor de todo es que el festival se ha hecho más famoso, por el hundimiento apoteósico del suelo de madera, y a lo mejor porque el año próximo se hunde también el pavimento enlosado.