La concesionaria calcula que unos 22 millones de viajeros usarán el autobús urbano
El uso del autobús urbano en Vigo sigue en aumento. La empresa concesionaria estima que este año alrededor de 22 millones de pasajeros viajarán en alguno de sus 136 vehículos que comunican la ciudad a través de sus 33 líneas que la atraviesan. Esta cifra supondría un incremento del 2,5% en relación a los resultados obtenidos en el ejercicio 2017, donde se registraron 21,5 millones de trasportes.
Así lo manifestó el director general de Vitrasa, Juan Carlos Villarino, tras el viaje conmemorativo en “Cometa”, el primer autobús que realizó el servicio el 1 de julio de 1968, hace cincuenta años. Como primer acto en la celebración de la efeméride, invitaron al alcalde Abel Caballero y a los concejales de Fomento y Transporte, David Regades y Ángeles Marra, respectivamente. “Desde que salieron los primeros autobuses hasta ahora la ciudad ha ido creciendo y nos hemos ido adaptando a los nuevos centros que han ido surgiendo como Navia, el PTL (Parque Tecnolóxico e Loxístico de Valadares), el hospital Álvaro Cunqueiro, el campus y el aeropuerto”, apuntó Villarino, quien aseguró, se hizo “con la máxima calidad, seguridad y rapidez”.
De una flota inicial de 32 autobuses en cuatro líneas se multiplicaron por ocho en vehículos que con motores Euro 6000 diesel y tecnología avanzada como wifi o cargadores de USB. Con estas dotaciones, desde Vitrasa dejaron claro que volverán a optar al contrato municipal una vez finalice la concesión en 2020. El Concello ya trabaja para denunciar el contrato el año que viene, ya que tal y como advirtió en su momento Marra, “la intención del gobierno local es no prorrogar la concesión”.
Un viaje en el tiempo
A bordo de “Cometa”, un Pegasos con matrícula PO- 59182, Alberto, conductor de Vitrasa desde hace 30 años y Manuel, inspector en el papel de cobrador, llevaron a las autoridades y a los responsables de Vitrasa y del grupo Avanza, en un viaje conmemorativo de 15 kilómetros, desde las instalaciones de Vitrasa, en la Estrada de Camposancos hasta la Porta do Sol. A 30 kilómetros por hora llegaron a la hora prevista. A la recuperación del vehículo histórico, custodiado hasta ahora en las cocheras de empresa, se sumó la recreación de la época, reproduciendo los anuncios en el interior del autobús y los uniformes grises del momento .
Abel Caballero aprovechó la ocasión para felicitar a todos los trabajadores que pasaron por la empresa estos años: “Vitrasa se convirtió en un símbolo para la ciudad, realizan un gran papel en una ciudad con unas características difíciles y nuevas pruebas a las que se han tenido que adaptar”. A cada viajero le entregaron un recreación del billete de hace 50 años, por 2,5 pesetas.
Próximamente se inaugurará una exposición itinerante por los barrios que recordará la historia común entre la ciudad y los autobuses de Vitrasa.
