“Vengo de una familia acostumbrada a usar su vida como material literario”

nnn  Ayanta Barilli (Roma, 1969) se estrena como novelista con “Un mar violeta oscuro”. Periodista, presentó y dirigió programas de televisión y radio, además de colaborar en medios escritos. La muerte de su abuela despierta en ella el deseo de conocer más sobre su familia. De esa investigación surge su ópera prima.
¿Qué es lo más difícil de escribir sobre su propia familia?
Encontrar el tono para trasladar las sensaciones polifónicas que se agolpaban en mi cabeza. La novela habla de cuatro generaciones de mujeres de mi familia que en mi mente se mezclaban. Fue complicado estructurar el relato y dar con el tono adecuado para mantener esa mezcla que formaba parte de la emoción que me genera.
¿Se reconoció en sus antepasados?
Trato sobre mi bisabuela, abuela y madre. Las tres tienen una importancia capital. ¡Claro que me he visto reflejada! Fue eso lo que me impulsó a sacar a la luz la historia antes de que se callase para siempre y asegurar por lo menos que llegase hasta mis hijos. Es una trayectoria del siglo XIX al XXI.
¿Descubrir secretos familiares le generó algún problema con los suyos?
Para contestar voy a citar a Delphine de Vigan en su novela “Nada se opone a la noche” que dice que no hay mejor manera de enfadar a la familia que escribir sobre ella. Yo vengo de familia de escritores acostumbrada a usar su vida como material literario, así que por parte española no tuve problema; la italiana, no lo sé, aún no se ha traducido. Lo que a mí se refiere he desnudado mi interior sin ningún pudor y mezclarlo con la ficción.
¿Ser hija de Sánchez Dragó fue un apoyo o un handicap?
Puede ser el mejor y el peor apoyo. Crecí con la banda sonora de la máquina de escribir, soy lo que soy por la educación que me dieron. Con mi padre tengo una relación extraordinaria, pero escribir es una labor solitaria, solo mi marido me ayudó en las correcciones. Y ya acabada se le envié.n