El perfil del puerto de Vigo se rodeó ayer de glamour con la llegada de uno de los yates más lujosos del mundo, el “Katara”.
Propiedad de un exemir de Qatar, pasó la noche amarrado en el muelle de Trasatlánticos. Con 124 metros de eslora, 20 de manga y los casi seis que sumergen bajo la línea de flotación, algunos estiman su valor en 300 millones de euros. Cuenta con setenta empleados.