Comerciantes y empresarios solicitan que alguien les explique el futuro de los inmuebles
nnn La apertura del concurso arquitectónico para reformar el hospital Xeral con vistas a transformarlo en la nueva Ciudad de la Justicia ha activados las alarmas en el entorno de As Travesas. La Asociación de Comerciantes y Empresarios de la zona (Aetravi) teme las repercusiones “irreversibles” del traslado de las actuales dotaciones judiciales de la calle Lalín con el cierre de negocios.
Víctor Fernández Misa, presidente de dicha asociación, asegura que su colectivo cuenta con un informe que encargó a una consultoría sobre las consecuencias de perder los juzgados en el entorno y los resultados son más que preocupantes. “Gran parte de las 3.744 empresas se verán obligadas a cerrar al perder el importante tráfico de funcionarios y de usuarios que generan los edificios administrativos de la calle Lalín”, lamenta.
El presidente asegura que si bien al principio tanto Concello como Xunta se preocuparon por el tema, “hace seis meses que no tenemos información alguna y no podemos esperar años a que den una solución. A veces hay que dar un golpe en la mesa para que te escuchen, como ocurrió con el entorno del Hospital Xeral. Su cierre era algo que iba a llegar pues el proyecto del nuevo centro hospitalario viene de lejos y aún así no se pensó hasta el último momento qué hacer con el edificio”.
La situación de las pequeñas y medianas empresas del entorno de Traviesas ha dado en el último año un giro de 360 grados. “Hemos pasado de unas grandes expectativas con la construcción de la Ciudad de la Justicia al expropiar los terrenos a de repente todo lo contrario, poner en riesgo la economía de un área en el que viven 40.000 personas”.
Para Fernández Misa no se debería llevar a cabo el traslado, argumenta que “si los políticos aseguraron en su día que el edificio del Xeral no podía soportar más reformas y que uso no era recomendado porque los años habían hecho mella en su estructura, ¿cómo es que ahora se encuentra en perfecto estado para meter allí toda una Ciudad de la Justicia?”.
El temor de los pequeños empresarios de Traviesas es que los actuales edificios judiciales, por los que pasan a diario cientos de personas, además de sus 500 funcionarios junto con los de Hacienda, se queden cerrados y vacíos sin ningún uso durante años. “Esta zona no lo aguantará”, advirtió.
De ahí, que Aetravi solicite que algún político de la Xunta con capacidad de decisión les explique el futuro de los juzgados. “No podremos esperar 17 años a que se le dé un uso a un edificio como ocurrió con el hospital y no entendemos por qué han hecho gastar dinero al Concello en expropiaciones si al final no se va a hacer ningún proyecto”.
Recuerda, además, que “la crisis nos pasó factura, como a todos, y cuando tratas de remontar llega este duro golpe del que puede que no nos recuperemos”.n
