El presidente de la junta de personal del área sanitaria de Vigo, Manuel González Moreiras (CIG), lamentó ayer que el gerente, Mario González, comparezca públicamente para ofrecer los datos de las listas de espera sin anunciar al mismo tiempo que “peleará” por conseguir más recursos para Vigo y para decir qué remedio podrá a medio y largo plazo.
Considera asimismo que el nuevo hospital es un edificio nuevo, pero que está sufriendo recortes y que no solucionará el problema. “El gerente obedece órdenes de la Consellería de Sanidad, no trabaja para nuestra área sanitaria y se esta enfrentando con casi todo el mundo”.
En cuanto a las listas de espera, recordó que no incluyen los datos de los pacientes que rechazan la oferta de operarse en centros privados y que estos pacientes tardan en regresar a la lista oficial, y que tampoco se informa de cuánto dura un proceso asistencial, desde que el paciente acude a su médico de Primaria hasta que le hacen las pruebas diagnósticas (una resonancia magnética, por ejemplo, tarda una media de 69 días), va a consulta (la demora media para ser atendido por el especialista es de 52 días) y finalmente entra en la lista para ir a quirófano. Según dijo, los pacientes que no son de prioridad 1 y 2 no mueren por estar en lista de espera, pero viven mucho tiempo con las molestias que pueda ocasionar su dolencia hasta que son finalmente atendidos.
Sindicatos como CCOO estiman que la lista de espera real en Vigo se eleva a 19.825 pacientes pendientes de una operación solo en los hospitales Xeral y Meixoeiro, sin contar Povisa: son 6.000 pacientes más de los que reconoce el Sergas en su página web. El hospital concertado vigues tiene a su vez a 5.310 pacientes en lista de espera quirúrgica. Los sindicatos no entienden que a pesar de las cifras “intolerables”de Povisa, donde los pacientes esperan una media de siete meses para operarse, el Sergas vaya a firmar un nuevo concierto en las mismas condiciones.
Por último, subraya que “no es que los vigueses estemos más enfermos sino que tenemos peores infraestructuras” y recordó que mientras un paciente del Chuvi espera 95 días y en Povisa 207 días, en Pontevedra solo son 30 días.
La formación AGE pidió ayer que se haga pública la lista no estructural (los pacientes que rechazan ir a la privada) y que se cumpla el acuerdo de que haya turnos de tarde en quirófanos y consultas.
