Victoria Besada Montenegro (Vigo, 1961), doctora en Ciencias Químicas y directora del Centro Oceanográfico de Vigo desde 2015, será la encargada de dar el pregón del Cristo de la Victoria el sábado, 4 de agosto, en la víspera de la procesión. Con ella la Cofradía abre las puertas a las mujeres a desempeñar esta función hasta ahora solo realizada por hombres.
¿Cómo recibió la invitación de la Cofradía a ser la pregonera del Cristo?
La verdad es que es un honor para mí. Desde pequeña siempre he vivido en mi casa lo que significaba la procesión, pero nunca pensé que me pudiera llegar a ser su pregonera. Además al ser la primera mujer que lo hace en un año tan especial para todas las mujeres implica una gran responsabilidad.
¿Cuál es el primer recuerdo que guarda relacionado con el Cristo?
Tanto para la familia de mi madre como para la de mi padre el primer domingo era una fecha muy importante. Recuerdo que cuando éramos pequeños íbamos en verano con mis abuelos a tomar las aguas a Carballiño y siempre teníamos que regresar para acudir a la procesión. En mi caso además el vínculo con el Cristo es fuerte porque nací en O Berbés, me críe en la Rúa Real y la vocación al Cristo siempre estuvo muy relacionada con el barrio.
¿Ya sabe cómo va a orientar su pregón?
Estoy esbozando ideas, la vivencia personal con Vigo y con el Cristo de la Victoria estará muy presente, pero también será un pregón relacionado con mi mundo laboral y con la ciencia, ya que he sido invitada a ser pregonera porque dirijo el Oceanográfico.
¿Qué papel considera que juega el mar en la idiosincrasia local y en la propia devoción al Cristo?
La ciudad de Vigo creció en torno a la Ría. El sector pesquero es clave en Vigo. La Cofradía también está unida a todo lo que es el mar.
¿Qué le va a pedir al Cristo en esta ocasión?
Un poco de todo. A nivel profesional que sigamos avanzando, para lo que la ciencia necesita apoyo, porque sin ella no hay futuro y no se puede colaborar con la sociedad. A nivel ciudad tenemos que continuar luchando por ser un motor económico esencial y a nivel social es un momento importante para las mujeres porque por fin está siendo reconocida la igualdad de derechos y oportunidades porque tenemos capacidad para alcanzar puestos con responsabilidad; es una idea que tiene que llegar a todos los ámbitos. Estamos en un momento de asumir muchos retos.n
