Los asaltos a domicilios logran frenar la subida y bajan ligeramente un 1,3% registrando más de 300 el pasado año
Los delitos contra el patrimonio, concretamente los robos violentos y a establecimientos comerciales siguen siendo el talón de Aquiles de las fuerzas de Seguridad en Vigo. A pesar de haber conseguido un descenso en los asaltos a domicilios, uno de los delitos que más preocupa a los ciudadanos, de un 1,3% en el último año, la estadística se ha incrementado respecto a las sustracciones que se comenten en establecimientos y otras instalaciones hasta en un 10% , lo que significa que se registran más de dos al día, según el balance de criminalidad del Ministerio de Interior. También hubo subida en los robos con violencia o intimidación, entre los que se incluye desde un atraco al tirón de un bolso.
En el lado positivo se encuentran los datos generales, la llamada tasa de criminalidad, que sigue a la baja. En 2017 se registraron casi un 2% menos de infracciones y delitos entre los que destacan los más graves, como los homicidios y asesinatos que descendieron entre un 50 y 100%.
Los delitos sexuales cayeron un 9,4% pero aún se sitúan en una media de cinco al mes, si bien son menos graves que en 2016 cuando se registraron nueve casos de agresión sexual con penetración frente a los cuatro del año pasado.
También descendieron los hurtos, que engloban el grupo de infracciones penales más abultado, con más de ocho diarios, arrojando una cifra anual todavía por encima de los 3.000.
Los datos corroboran asimismo una tendencia que tanto Policía como Guardia Civil han detectado en el último año, el incremento del tráfico de drogas en el municipio. Durante 2017, hubo un total de 70 delitos relacionados con la compra y venta de estupefacientes, lo que supone un 1,4% más que en el ejercicio anterior. A eso hay que sumarle el incremento de operativos realizados por las fuerzas de Seguridad que han logrado desarticular importantes redes de narcotraficantes, algunas abortando incluso los planes de puesta en marcha en Galicia.
Las riñas y lesiones por peleas se mantienen prácticamente invariables con sólo una menos en 2017 (99) respecto a 2016 (100).
