El concejal del PSOE, imputado con otras 3 personas por prevaricación y negociaciones prohibidas a los funcionarios, no permitió preguntas. La oposición no pide su cese, salvo EU. Carlos Font dio "todo su apoyo" en nombre de los concejales del gobierno local
Ángel Rivas convocó a los medios ayer a las once en el consistorio tras conocerse su imputación a resultas del caso Hormigones Valles Miñor: la empresa que dirigía y que entre 2010 y 2012, en pleno Plan E, asfaltó la mayoría de las calles humanizadas por empresas adjudicatarias del Concello, en cuyo gobierno local está el propio Rivas. El fiscal recibió una denuncia y ve delito y el juez le ha imputado y tendrá que declarar entre el 20 y 22 de octubre en compañía de un funcionario y dos responsables de las constructoras adjudicatarias de las obras y que a su vez adjudicaron a Valle Miñor los trabajos. La expectación se vio defraudada cuando el concejal se limitó a leer el comunicado enviado el día anterior, donde declara su inocencia, se declara perseguido y anuncia su colaboración con la Justicia, sin permitir preguntas "porque sólo responderá ante el juez". A su lado, Carlos Font, portavoz de PSOE, que hizo otra breve declaración de apoyo de los concejales del gobierno local -sin citar al alcalde, curiosamente- y tampoco permitió preguntas, tras insistir en su "confianza en el recto proceder" de Rivas y en que ahora tiene la oportunidad de defenderse. Ahí terminó todo. Porque después los portavoces de PP, Chema Figueroa, y BNG, Iolanda Veloso, pasaron por la misma sala para hacer declaraciones notablemente tibias, sin reclamar el cese del edil. El BNG demandó explicaciones y se limitó a recordar que en el Bloque dimiten los imputados, pero no exigió la misma fórmula. Y Figueroa, todavía más tibio, al negarse a condenar a Ángel Rivas, pese a que sus declaraciones en 2012 eran muy contundentes. Ni pidió el cese, ni una investigación ni siquiera anunció que el asunto lo llevará a pleno. El nuevo clima con el PSOE...
El único que sí hizo sangre ayer fue Esquerda Unida, la mitad de la coalición permanente AGE, cuyo coordinador local, Rubén Pérez,pidió abiertamente la dimisión inmediata del concejal del PSOE. En este sentido, recordó que había registrado en el ayuntamiento una petición al pleno para, de acuerdo con el artículo 51 de la legislación orgánica municipal, instar la creación de una comisión especial de investigación de la licitación y seguimiento de los contratos públicos relacionados con las empresas Cespa , Eiriña y otras relacionadas con las humanizaciones de las calles. Rubén Pérez consideró "infame" el silencio del alcalde.
Caballero tampoco habla y se remite al comunicado
Abel Caballero, como se esperaba, no quiso hablar y se remitió a la comparecencia ante la prensa sin preguntas del concejal Ángel Rivas, imputado en una causa que investiga los supuestos delitos de prevaricación administrativa y negociaciones prohibidas a funcionarios. Durante una visita al instituto República Oriental de Uruguay, Caballero ha dado por toda explicación la lectura, minutos antes, del comunicado que ayer difundió Rivas.
"Hay que dejar trabajar a la Justicia", dice el PP
El Grupo municipal del PP señaló que los ciudadanos "merecen una explicación" sobre la imputación del edil socialista Ángel Rivas, aunque ha matizado que "hay que dejar trabajar a la Justicia".
Pese a reconocer que la imputación de un concejal del gobierno es "un tema grave", el portavoz del PP, Chema Figueroa, ha abogado por "esperar a que los jueces dictaminen" y en ningún momento pidió la dimisión ni un pleno. "Cada uno es responsable de sus actos", ha apuntado Figueroa, al tiempo que ha pedido que el procedimiento judicial se resuelva "con la máxima celeridad y transparencia". Preguntado por los medios sobre si Rivas tendría que dimitir, el portavoz del PP ha eludido pronunciarse y ha insistido en que esa decisión corresponde al imputado o, en todo caso, al gobierno municipal.
"Sería un error dar nuestra opinión ahora, que hay un procedimiento judicial abierto", ha indicado Figueroa quien, en enero de 2010, fue mucho más contundente al acusar públicamente a Rivas de beneficiarse de adjudicaciones de obras de humanización.
El BNG asegura que el alcalde "se esconde"
La portavoz municipal del BNG, Iolanda Veloso, también citó a los medios para dar su opiníon. Y aunque fue algo más contundente, tampoco resultó exigente. Así, quizá lo más llamativo fue cuando lamentó que el alcalde, "cuando hay un problema, se esconde. No da la cara ni da las explicaciones políticas a las que está obligado", recordando que Abel Caballero mantenía varias veces al día encuentros con los medios y tenía tiempo de sobra para dar explicaciones adecuadas sobre los problemas judiciales.
La portavoz nacionalista exigió la asunción de "responsabilidades políticas" por la imputación de Rivas y a Caballero, que "no se esconda", pero no fue más allá pese a las preguntas.
Así, señaló también que el BNG "tiene claro" que cuando uno de sus cargos públicos es imputado, "dimite", y que cada partido "debe responder de sus decisiones en función de sus posiciones ideológicas y políticas".
Con todo, y también pese a las sucesivas cuestiones que se le formularon, Iolanda Veloso no quiso en ningún momento pedir el cese del edil.
