“Los Guardianes de la Ría” será presentado en una sesión-coloquio en la Autoridad Portuaria
nnn Hubo un tiempo en el que la soledad acompañaba a uno de los oficios del que dependían las vidas de los navegantes. Eran los fareros, hoy técnicos de señales marítimas, cuyas vidas transcurrían en los faros, situados en los lugares más inhóspitos de la costa. Sobre esta profesión trata el cortometraje documental “Los Guardianes de la Ría–Fareros”, del fotógrafo Xandro Barberena, que mañana, sábado, 3 de diciembre, será presentado en el Edificio de Sesiones de la Autoridad Portuaria de Vigo (Muelle de Trasatlánticos, s/n, a las 19.30 horas). Será una sesión que irá acompañada de una serie de charlas-coloquio con José Antonio Mera, farero jubilado y actor principal del cortometraje, y con el autor de la cinta, que hablará también sobre su fotografía y el time-lapse.
Y es que, precisamente, este documental destaca por su historia, en la que los faros de Vigo tienen un especial protagonismo, y por su lenguaje narrativo, con el uso de la fotografía, el video y el time-lase, una técnica que sirve para mostrar diferentes motivos o sucesos que por lo general suceden a velocidades muy lentas e imperceptibles al ojo humano.
Las grabaciones de “Los Guardianes de la Ría–Fareros” se han realizado en la Ría de Vigo y de Pontevedra, destacando los faros de Cabo Silleiro, Monte Faro, Punta Canabal, Punta Subrido, Punta Robaleira, Cabo Home, Cabo Estai, Tenlo Chico (Tambo) y en otros lugares como Ons y Sálvora.
Para su realización, el director, Xandro Barberena, ha contado con la colaboración de la Autoridad Portuaria de Vigo, de Luis Martinez, encargado de ayudas a la navegación de este ente; Julio Vilches, farero en la isla de Sálvora; Manuel Expósito, farero de Cabo Silleiro; Pepin Fernandez y los guardas forestales del Parque Nacional Islas Atlánticas de Galicia, entre otros.
El protagonista, Antonio Mera, es un farero ahora ya jubilado y que durante años controló los faros y balizas desde Cabo Silleiro a Cabo Home. La evolución de su vida es también la de los faros, que fueron poco a poco transformándose hasta dejar de depender de la mano del hombre. n
