El Día Mundial del Sida también señaló un repunte de otras enfermedades de transmisión sexual entre los jóvenes
En Vigo se diagnostican entre 60 y 70 casos de VIH al año, principalmente por relaciones sexuales entre hombres sin protección, según se puso de manifiesto durante el acto celebrado en la Plaza de la Independencia con motivo del Día Mundial de Lucha contra el Sida. La citada convocatoria incluyó la lectura de un documento sobre dicha enfermedad, la suelta simbólica de globos y la distribución de material dentro de una actividad de sensibilización e información.
La responsable de Enfermería de la Unidad Asistencial de Drogodependencias Cedro, Mariló Fernández, protagonizó la lectura de un comunicado sobre los avances relacionados con la lucha contra el sida, acto al que se sumaron otros colectivos de la ciudad como Médicos del Mundo, IES do Castro y Escuela Enfermería de Povisa.
En relación con la mortalidad por la referida enfermedad, destacó que ha disminuido mucho en personas afectadas por el sida gracias a programas desde los centros de prevención y a que los tratamientos que son más eficaces. Sin embargo, se observa un repunte de las transmisiones por vía sexual sobre todo relaciones de hombres con hombres sin utilizar preservativo. La situación es preocupante en las relaciones heterosexuales en especial aquellas vinculadas al consumo de drogas y bebidas alcohólicas.
El colectivo de consumidores de drogas por vía intravenosa, uno de los grupos más afectados hace años, presenta una baja incidencia del sida en la actualidad. La representante de Cedro indicó que durante años han sido eficaces los programas de sexo más seguro y los de prevención de infecciones.
"Quizá en otros colectivos hay información, pero el hecho de que el sida dejara de ser una enfermedad mortal de necesidad a ser crónica, produjo un relajo que hace que la gente piense que con una pastilla que toma está todo solucionado, cuando hay que tener un tratamiento de por vida", añadió Mariló Fernández.
Los portavoces de los grupos participantes en el acto reconocieron que desde las instituciones hay carencias a nivel social, al no ser lo mismo una persona VIH positiva que tenga una situación socioeconómica buena, lo cual le permite acceder sin problema a los hospitales las veces que le haga falta, a tener una alimentación adecuada y una calidad de vida buena. Resaltaron que las personas con escasos recursos económicos tienen una afectación mayor del sida, "es más fácil que evolucionen de ser simplemente VIH positivo a enfermos de sida. Porque carecen de los más mínimo, y las respuestas sociales son muy lentas, pues pueden tardar meses e incluso años en recibir los tipos de ayudas existentes en ese terreno".
La portavoz de la Unidad Asistencial de Drogodependencias expuso que de la misma forma que hay unas urgencias médicas a las que se está dando respuesta más o menos inmediata, de la misma manera tiene que haber unas urgencias sociales que den esa respuesta más o menos inmediata a las personas en una situación socioeconómica mala y que están enfermas. "Mientras esas dos partes no estén equilibradas siempre habrá diferencias a la hora de encarar con éxito la lucha contra el sida", matizó Mariló Fernández, quien, por otra parte, reconoció que continúa el estigma y la discriminación contra las personas diagnosticadas de VIH, que en muchas ocasiones esconden su problema para evitar la marginación.
El acto sirvió asimismo para recordar que hay un repunte importante de otras enfermedades de transmisión sexual como sífilis y gonorrea, sobre todo entre la población juvenil, ante el relajo que se produce en fiestas descontroladas con consumo de alcohol y drogas, que producen una baja la capacidad volitiva de las personas que llevan también a los embarazos no deseados en las adolescentes.
