La procesión de Santa María partió ayer como cada año de la Concatedral y recorrió las calles del Casco Vello
nnn El Casco Vello acogió ayer la celebración de la tradicional procesión de Santa María, la patrona de Vigo. Como cada año, los fieles asistieron a la eucaristía del mediodía para a continuación venerar a la imagen cubierta por su característico manto azul y los ángeles a sus pies, que simbolizan su asunción.
La patrona de Vigo, nombrada así 1617 por librar a la ciudad de un ataque pirata, no goza del reconocimiento de los considerados patrones de Vigo. Ni el Cristo de la Victoria, cuya imagen también reposa en la Concatedral, ni San Roque -que se celebran antes y después de Santa María- gozan de ese título más que de forma popular.
A la procesión acudió el delegado de la Xunta en Vigo, Ignacio López-Chaves; la portavoz del PP de Vigo, Elena Muñoz; el concejal socialista Ángel Rivas y la diputada popular Marian García como representación política de la ciudad.
Tras finalizar la procesión, que recorrió varias calles del Casco Vello, la imagen entró de nuevo en la Concatedral para finalizar la celebración eucarística con la adoración a Santa María y la tradicional ofrenda floral por parte de los fieles, gesto que no se olvida aunque pasen los años por esta festividad.
La fiesta que rodeaba el día de la Asunción en Vigo tuvo gran popularidad hasta mediados del siglo XIX, momento en el que se perdió y solo se conserva la procesión. En ese momento ganó popularidad el Cristo de la Victoria por la Reconquista.n
