En este contexto preelectoral se da por seguro en el Bloque que la viguesa Olaia Fernández Davila no repetirá escaño después de tres legislaturas seguidas en el Congreso, desde 2004. Fuentes del BNG insistieron en que ella misma ya lo ha indicado y que por tanto, salvo una sorpresa inesperada, no va a optar a continuar con su escaño en Madrid en unos comicios donde el BNG de nuevo va a tener que sudar para mantener su representación.
Eso en el caso de que la formación nacionalista vaya en solitario a las elecciones generales, lo que ahora mismo no está asegurado. La otra posibilidad es que fragüe la enésima candidatura de unidad de la izquierda nacionalista gallega. Si es así, tampoco va a ser fácil ponerse de acuerdo entre los socios, incluso con primarias, ya que en ese caso el BNG lo tendría más fácil por disponer de mayor militancia. Como explicaba ayer un dirigente del Bloque de forma sarcástica: “No tendremos ahora tantos votos, pero sí militantes y simpatizantes” para ganar unas primarias de calle.
Otro grupo que también ha garantizado su presencia es La Izquierda, del exjuez Garzón, con Lois Pérez Leira al frente en la provincia.
