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El número de perros peligrosos se dispara y son el 5% del total

Un Rottweiller, una raza popular que cuenta con 217 ejemplares registrados en Vigo potencialmente peligrosos.
photo_camera Un Rottweiller, una raza popular que cuenta con 217 ejemplares registrados en Vigo potencialmente peligrosos.

En apenas ocho años se ha multiplicado por cuatro el registro de canes con un registro especial por sus condiciones. También se incrementa con fuerza la cifra de mascotas

 En Vigo hay ya 1.667 perros peligrosos registrados como tales, según las  cifras que maneja la Consellería de Medio Rural, que mantiene una estadística oficial de altas y bajas. El Concello de Vigo también tiene su propia contabilidad, con una cifra algo menor, 1.434 anotados, pero en ambos casos se trata de un número muy elevado y creciente. 
En apenas ocho años se han multiplicado por cuatro los canes considerados  potencialmente peligrosos, que se dividen en 14 razas principales. Suponen ya el 5 por ciento de todos los perros registrados en Vigo, que a día de hoy ascienden a 35.528, que serían todos los que tienen “chip” de identificación, obligatorio, aunque habría miles más que carecen de dicha protección. 
En 2010, ocho años después de abrirse el registro obligatorio, sólo había 456 ejemplares considerados potencialmente agresivos en Vigo. En 2013 eran 717 y cinco años más tarde el doble, y todo apunta a que seguirá creciendo, como el propio censo canino. 
Por razas, copan las tres primeras posiciones con respecto a los registros vigueses en cuanto al número el Pitbul terrier, quizá el más conocido, con 273 ejemplares: siguen el American Stadfforshire terrier, con 236, y el Rottweiller, con 217, uno de los más conocidos. La cuarta es para otro can del grupo terrier, el Stadfforshire bull, con 163. 
El resto se reparten de forma menos importante, con el Doberman, con 70 y el Dogo de Burdeos, con 36 y el Dogo Argentino, con 26, entre otros como el Presa Canario, con 24 y el Fila brasileño, con 17. 
Además hay un importante grupo de mestizos con 134 ejemplares considerados peligrosos por su origen. 

DESDE 2002
La ordenanza que entró en vigor en 2002 y que recoge las obligaciones de los propietarios de estos animales potencialmente peligrosos contempla multas entre los 300 y los 2.400 euros, aunque las infracciones “muy graves” podrían llegar a 15.000 euros o incluso más. En principio, la competencia en materia sancionada le corresponde a la Xunta de Galicia a través de Medio Rural.  
Como es conocido, para tener un perro de estas características el dueño debe someterse entre otros requisitos a un test para comprobar que se trata de una personalidad equilibrada capaz de controlar a un animal. Además se requiere que sea mayor de edad, no tener antecedentes penales y sobre todo someterse a una evaluación  psicológica que certifique sus condiciones para hacerse cargo del perro. Por último, antes de obtener el permiso,  deberá contar con un seguro de responsabilidad civil por daños a terceros de al menos 125.000 euros de cobertura, que se renovará cada año. 
En lo que se refiere a la licencia, cada cinco años hay que renovarla. Pese a todas estas dificultades y el riesgo de multas a quien las incumpla, la tenencia de perros potencialmente agresivos no ha decaído: el pasado año se produjeron dos graves episodios por el asalto a sendas mujeres, en Covelo y Mos, que se saldaron con la hospitalización de ambas y lesiones de importancia. 

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