La directora de la Escuela, Natalia Caparrini, afirma que fue un logro para la Universidad y también para Galicia, y ahora continuan diseñando planes para promocionar los estudios
La Escuela de Minas logró la declaración de “singularidad” para su grado de Ingeniería de los Recursos Mineros y Energéticos dentro del sistema universitario gallego. Supone garantizar la supervivencia de un título que no conseguía alcanzar el tope mínimo de 50 alumnos matriculados en primer curso, pero que la Xunta considera estratégico para Galicia y lo convierte por ello en excepción. Es el único grado con este status enla Universidad de Vigo.
Desde la Escuela de Ingeniería de Minas y Energía lo consideran un logro para la institución académica pero también para la profesión y para todos los sectores económicos (y no son pocos) que tienen relación con este título en la Comunidad Autónoma.
La directora de la Escuela, Natalia Caparrini, asegura que esta declaración, que llegó a finales del año pasado, les da una cierta tranquilidad y un margen para seguir trabajando en la difusión de estos estudios y del trabajo científico que realizan para aumentar la demanda. Es un camino que emprendieron hace tiempo y que les lleva a organizar cada año un amplio programa de actividades con talleres, exposiciones, charlas, concursos de fotos, participación en ferias, visitas de escolares y otros eventos.
En los últimos tres años se matriculaban una media de 28 alumnos en primer curso. Sin embargo, destacan que es un título con múltiples salidas laborales, desde ingeniería y consultoría hasta energía, minería, construcción, obra civil, o materiales y metalurgia, y en el que el 84% de los titulados logra encontrar trabajo en menos de un año. Estos datos provienen de un estudio de inserción laboral de los egresados entre 1992 y 2017 realizado por la propia Escuela.
También comprobaron en ese estudio que un 59% de los titulados se quedaron en Galicia, un 26%trabaja en otras comunidades autónomas y un 15% en el extranjero desde Chile hasta Australia pasando por muchos otros países.
¿Cómo se logró la singularidad de este grado? La Xunta había establecido en un decreto que los títulos del Campus de Vigo debían alcanzar un mínimo de 50 alumnos de nuevo ingreso. Poco tiempo después decidió que los títulos por debajo de estas cifras debían aprobar un plan de viabilidad y se valorarían sus características para considerarlo esencial e indispensable dentro del sistema. Una resolución posterior fijó los criterios para entrar en la categoría de singular: que sea imprescindible para para la formación de recursos humanos especializados que permitan dar cobertura a las necesidades del sistema educativo de Galicia; tener una vinculacuión con la especialización del campus en el que se imparte; que sean estudios en lengua gallega; o que estén vinculados a sectores considerados estratégicos por la Xunta. Minas se acogió a dos de estos criterios y los argumentó en su solicitud: por un lado, por su implicación en el Vigotecnológico, que es la especialización del campus de Vigo, en la vertiente de energía e industria, y por otro lado, por su relación con sectores industriales considerados estratégicos por la Xunta y en los que precisamente también trabajan sus egresados.
