El Museo de Arte Contemporáneo (Marco), el centro expositivo de mayor éxito de Vigo y a la cabeza en Galicia en su género, se encuentra en peligro ante la negativa de la Diputación a hacer frente a sus obligaciones como miembro del patronato.
En la misma posición se encuentran el Ministerio de Cultura y la Xunta, aunque estos dos últimos estamentos no han hecho oficial su negativa a continuar realizando sus aportaciones. La Diputación, en cambio, ha decidido apostar todo por su propio museo, el Provincial de Pontevedra, 'olvidándose' de atender a la mayor ciudad de la provincia y de toda Galicia. Ahora mismo el Museo de Pontevedra recibe 4,2 millones anuales de la institución provincial.
El Marco es un ejemplo de idea acertada y dentro de unos días cumplirá diez años desde su apertura, con unas cifras espectaculares y en aumento, sin parangón en Vigo, donde los museos de Castrelos, Alcabre y la Ferrería manejan cifras mucho más modestas. El último ejercicio completo, 2011, pasaron por el centro de arte de la calle Príncipe más de 116.000 visitantes, su récord, lo que supone el doble que los que lo hicieron por el Centro Galego de Arte Contemporáneo, en Santiago, que decrece año tras años. En el ránking de museos de Galicia ocupa el Marco la cuarta posición tras el Provincial de Pontevedra, que alimenta la Diputación ahora de forma absoluta, más desde que el presidente del organismo, Rafael Louzán, decidió suprimir el patronato que dirigía el centro cultural pontevedrés para poder gestionarlo a su gusto, sin tener que llegar a acuerdos con otras instituciones o particulares.
La Diputación tenía una deuda acumulada de 450.000 euros que satisfizo a finales de 2011. No obstante, no ha aportado ni un euro de los 145.000 de 2012, lo que lastra de forma decisiva la continuidad del Marco. La Xunta también adeuda 300.000 euros, en tanto que mantiene su apoyo al CGAC (3,2 millones), pese a que apenas recibe la mitad de público anualmente.
La dirección del Marco lo tiene claro: ahora mismo todo recae sobre el Concello, que pone 805.000 euros sobre un presupuesto total de 1,05 millones. El resto depende de la Diputación, muy poco frente a los 1,7 millones de euros que manejaba hace tan sólo unos años. Menos dinero supone menos posibilidades para seguir como un polo de atracción internacional (como ha ocurrido recientemente con los Guinness de solos de guitarra).
Todo ello cuando el 5 de octubre se abre una exposición, 'A balea negra', sobre el 'Prestige', que servirá para conmemorar el décimo aniversario del Marco, museo que se inauguró precisamente el 13 de noviembre de 2002, coincidiendo con el naufragio del petrolero. Todo un presagio.
Caballero carga contra el ente provincial de nuevo por la uned
Caballero volvió a cargar contra la Diputación al considerar que la contestación de la UNED desfavorable a su planteamiento para la puesta en marcha del aula local demuestra que 'no hay la mínima intención' de abrirla y acusó al presidente de la Diputación -que preside el patronato de la UNED-, Rafael Louzán, de no querer que esté lista 'antes de las elecciones'. Caballero insiste en designar él mismo al coordinador de la UNED.
Mantuvo que el nombramiento de la directora de la UNED es 'político' y realizado por el 'señor Louzán'; al tiempo que ha censurado que, pese a que el Ayuntamiento propuso abrir el aula asumiendo todos los gastos, 'se plantean problemas'.
Dijo que 'había un acuerdo' sobre que el director del aula viguesa sería nombrado por la Universidad y con el visto bueno del Ayuntamiento, pero que ahora 'se descuelgan porque Louzán dice que no'. Asimismo, indicó que en el acuerdo aparecía que la comisión de seguimiento estaría presidida por la concejala de Educación pero que ahora la 'quiere presidir la UNED' y que la sede judicial 'sea Pontevedra' y no Vigo, pretensión que regresa a etapas ancestrales'. El concejal Relova dijo que 'ni PP ni Diputación tienen que ver con el rechazo de un convenio que el alcalde ya sabía que no pasaría la asesoría jurídica de la UNED'.
El Marco es un ejemplo de idea acertada y dentro de unos días cumplirá diez años desde su apertura, con unas cifras espectaculares y en aumento, sin parangón en Vigo, donde los museos de Castrelos, Alcabre y la Ferrería manejan cifras mucho más modestas. El último ejercicio completo, 2011, pasaron por el centro de arte de la calle Príncipe más de 116.000 visitantes, su récord, lo que supone el doble que los que lo hicieron por el Centro Galego de Arte Contemporáneo, en Santiago, que decrece año tras años. En el ránking de museos de Galicia ocupa el Marco la cuarta posición tras el Provincial de Pontevedra, que alimenta la Diputación ahora de forma absoluta, más desde que el presidente del organismo, Rafael Louzán, decidió suprimir el patronato que dirigía el centro cultural pontevedrés para poder gestionarlo a su gusto, sin tener que llegar a acuerdos con otras instituciones o particulares.
La Diputación tenía una deuda acumulada de 450.000 euros que satisfizo a finales de 2011. No obstante, no ha aportado ni un euro de los 145.000 de 2012, lo que lastra de forma decisiva la continuidad del Marco. La Xunta también adeuda 300.000 euros, en tanto que mantiene su apoyo al CGAC (3,2 millones), pese a que apenas recibe la mitad de público anualmente.
La dirección del Marco lo tiene claro: ahora mismo todo recae sobre el Concello, que pone 805.000 euros sobre un presupuesto total de 1,05 millones. El resto depende de la Diputación, muy poco frente a los 1,7 millones de euros que manejaba hace tan sólo unos años. Menos dinero supone menos posibilidades para seguir como un polo de atracción internacional (como ha ocurrido recientemente con los Guinness de solos de guitarra).
Todo ello cuando el 5 de octubre se abre una exposición, 'A balea negra', sobre el 'Prestige', que servirá para conmemorar el décimo aniversario del Marco, museo que se inauguró precisamente el 13 de noviembre de 2002, coincidiendo con el naufragio del petrolero. Todo un presagio.
Caballero carga contra el ente provincial de nuevo por la uned
Caballero volvió a cargar contra la Diputación al considerar que la contestación de la UNED desfavorable a su planteamiento para la puesta en marcha del aula local demuestra que 'no hay la mínima intención' de abrirla y acusó al presidente de la Diputación -que preside el patronato de la UNED-, Rafael Louzán, de no querer que esté lista 'antes de las elecciones'. Caballero insiste en designar él mismo al coordinador de la UNED.
Mantuvo que el nombramiento de la directora de la UNED es 'político' y realizado por el 'señor Louzán'; al tiempo que ha censurado que, pese a que el Ayuntamiento propuso abrir el aula asumiendo todos los gastos, 'se plantean problemas'.
Dijo que 'había un acuerdo' sobre que el director del aula viguesa sería nombrado por la Universidad y con el visto bueno del Ayuntamiento, pero que ahora 'se descuelgan porque Louzán dice que no'. Asimismo, indicó que en el acuerdo aparecía que la comisión de seguimiento estaría presidida por la concejala de Educación pero que ahora la 'quiere presidir la UNED' y que la sede judicial 'sea Pontevedra' y no Vigo, pretensión que regresa a etapas ancestrales'. El concejal Relova dijo que 'ni PP ni Diputación tienen que ver con el rechazo de un convenio que el alcalde ya sabía que no pasaría la asesoría jurídica de la UNED'.
