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Maersk desvía desde esta semana más contenedores al puerto de Marín

Contenedores ayer en la terminal marítima de Guixar, donde destacan los de Maersk, aunque cada vez menos sobre el total de mercancía en depósitos.
photo_camera Contenedores ayer en la terminal marítima de Guixar, donde destacan los de Maersk, aunque cada vez menos sobre el total de mercancía en depósitos.

El puerto vigués advierte que "los usuarios mandan" tras el nuevo traslado de mercancía a la terminal vecina

El largo y lento camino iniciado por Maersk para abandonar Vigo y trasladarse a Marín avanzará esta semana cuando a partir del miércoles cese por completo la actividad de contenedores "secos", sin refrigeración ni alimentos, que desde entonces se centralizarán en la Ria de Pontevedra, cuya terminal -Pérez Torres Marítima- se hizo con la gestión que tenía Termavi en una subasta el pasado mes de abril. En teoría sería un golpe menor por cuanto el principal movimiento de la naviera nórdica en Vigo está relacionado con los productos del mar, que se mantienen por el momento en Guixar, con doble escala en Vigo y Marín y enormes diferencias: en la terminal viguesa puede descargar entre 700 y mil contenedores y apenas una décima parte en Pontevedra. Pero a partir de ahora Maersk tendrá más peso en el puerto vecino. Lo que ha vuelto a encender alas alarmas, ante las dudas sobre los planes de la empresa, que supone el 40 por ciento de todos los depósitos que transitan por las instalaciones viguesas. 
El presidente de la Autoridad Portuaria, Enrique López Veiga, reconoce su temor, pese a que el año va en muy buenos datos, con la mercancía general en contenedores creciendo como nunca en el primer semestre. Pero la amenaza sigue en pie. "No va mal el año, las tendencias son positivas y seguimos en senda de recuperación pero las amenazas están ahí", explicaba ayer a este diario, advirtiendo sobre el cambio que se iniciará desde el día 31. "Vamos a ver que pasa a partir de ahora. Porque hasta ahora con Maersk vamos salvando el año, pero no podemos saber qué ocurrirá", indicó López Veiga, quien conoce los movimientos de la naviera a través de los clientes y no mediante interlocución directa. 
La pesca congelada -la carga más importante para los intereses locales- no está afectada por la decisión de Maersk y por tanto, continuará en Vigo al menos hasta final de año, pero el resto de la mercancía, incluyendo maquinaria, pasará a Marín. "Resulta  inquietante y  tiene efectos", reconoció  Enrique López Veiga. La importación de contenedores "secos" ya se trasladó a la Ría de Pontevedra e idéntico camino tomará ahora la exportación viguesa. "Está por ver la reacción de los clientes, que son los que mandan. Ya pasó con la pesca, las empresas no quieren descargar fuera de Vigo", indicó el presidente de la Autoridad Portuaria. n

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