La Luna dio un breve “mordisco” al Sol

Un público entusiasmado participó ayer en el observatorio que montó en Samil la Fundación Ceo, que puso a disposición de los interesados instrumentos de observación y de protección.
photo_camera Un público entusiasmado participó ayer en el observatorio que montó en Samil la Fundación Ceo, que puso a disposición de los interesados instrumentos de observación y de protección. // JV Landín

Cientos de personas participaron ayer en el observatorio organizado por la Fundación Ceo, Ciencia y Cultura en el paseo de Samil para asistir al eclipse de sol parcial. Hasta el año 2026 no se verá el próximo y será total

 La fascinación por el cosmos se dejó sentir ayer en Vigo con la participación de cientos de ciudadanos en el “observatorio” del eclipse parcial de Sol, que organizó anoche la Fundación Ceo, Ciencia y Cultura en el paseo de Samil, y también repartidos por todo el paseo con métodos de protección caseros. Cerca de las nueve de la noche, el público se preparaba para contemplar uno de los grandes espectáculos de la naturaleza, la Luna tapando al Sol, aunqeu solo fuese en un 15% de la superficie. La emoción iba creciendo conforme se acercaba la hora y los miembros de la Fundación iban colocando telescopios, prismáticos, un solarscope y demás dispositivos. El eclipse comenzó  a las nueve menos cuarto de la noche y se iba haciendo cada vez más visible hasta que a las 21.11 unas nubes taparon el Sol. En realidad ya quedaban pocos minutos para la puesta de Sol, que marcaba el fin del eclipse. Éste era el principal temor. Se esperaba que entrasen nubes a partir de las diez de la noche, pero se adelantaron. Aún así hubo espectáculo.
El próximo eclipse de Sol se verán en Galicia en el año 2026 y esta vez sí será total. Para el presidente de la Fundación Ceo, Enrique Alonso, el interés se debe a que es un fenómeno poco frecuente. Esta entidad organiza múltiples actividades de divulgación en Portugal y Galicia (los sábados en Vigozoo) y las visitas al Observatorio de Forcarei. También hubo una quedada para ver las Perseidas y otras veces para ver cómo un asteoroide oculta una estrella unos segundos o un minuto. “Había unas 500 personas  tumbadas mirando al cielo en A Madroa para ver las Perseidas pasándolo como enanos”, recuerda Alonso. Ayer llevaron elementos de protección porque “en un eclipse la luz  del Sol se vuelve más intensa, entra en la retina, te la quema y no te enteras porque no duele, se pueden producir lesiones irreparables. Que se lo digan al maestro Galileo que se murió casi ciego por observar eclipses a simple vista”.
Entre el público estaba el astrofísico del CSIC, Luis Miranda, vigués que trabaja en Granada y forma parte del Patronato de la Fundación. Seguía las noticias de Estados Unidos, donde el eclipse era total y se estaban tomando imágenes (en tierra y en aviones) de la corona del Sol con distintos filtros para luego hacer mediciones.
 

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