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Los libros más valiosos del mundo desde 50 céntimos

La librería de Aida abrió hace unos meses en la calle México 13. Vende libros desde los 50 céntimos a los cuatro euros para financiar el tratamiento pediátrico de niños en Guinea Bissau. En la fotografía superior, dos de las voluntarias, Sainza Barroso (izquierda), que conoció la acción de la ONG sobre el terreno, y Raquel Rodríguez.
photo_camera La librería de Aida abrió hace unos meses en la calle México 13. Vende libros desde los 50 céntimos a los cuatro euros para financiar el tratamiento pediátrico de niños en Guinea Bissau. En la fotografía superior, dos de las voluntarias, Sainz

La ONG Aida abrió en Vigo su primera librería solidaria para financiar sus proyectos médicos en Guinea Bissau

 Con 3.000 libros de segunda mano procedentes de Madrid y con una librería instalada en un fin de semana, unos 20 voluntarios abrieron a principios de verano Aida Books & More. Es una librería solidaria, en México 13, la primera que la ONG Aida, Ayuda, Intercambio y Desarrollo monta en Galicia y  la octava en toda España. Gestionada de manera altruista, ofrece ejemplares donados con precios que oscilan entre los 50 céntimos y los 4 euros. Se consideran los libros más valiosos del mundo porque lo que se recauda con su venta se destina íntegramente a financiar proyectos pediátricos en Guinea Bissau.
En el grupo vigués de colaboradores, Raquel Rodríguez se encarga del área de la comunicación y de divulgar la acción de la ONG: “Son libros que salvan vidas porque con lo que se obtenga en Vigo, se costearán los tratamientos de niños que deben ser evacuados a Europa (España, Italia, Suiza o Portugal) para operarlos”. Aida cubre los gastos médicos y la estancia tanto del paciente como de uno de sus progenitores que lo acompaña en el viaje.
En los últimos meses amplió su actividad en este estado africano con la gestión de farmacias o la organización de talleres para las madres de los enfermos. Además beca a licenciados en medicina de Guinea Bissau para que hagan su especialidad en Europa y luego regresen a ejercer a su país.
Sainza Barrosa también es voluntaria en la nueva librería. En su caso, conoció la labor de ONG sobre el terreno. Ginecóloga, pasó unas vacaciones solidarias en Senegal colaborando con la ONG Mujer y Madre y fue donde entró en contacto con Aida. “Nos enviaron para tratar distintos tipos de cáncer y nos remitieron a un niño de dos años con un tumor ocular, esta ONG estaba gestionando su traslado a España para ser operado, pero se murió antes”. Este no fue uno de los casos que más habituales: “En Guinea Bissau hay muchos menores que padecen fiebre reumática, esto afecta a las válvulas cardíacas y tienen que ser tratados; es algo que aquí ya no se ve”, indicó. Como activista y voluntaria, Sainza Barroso destaca de esta ONG la transparencia de sus cuentas: “Se ve claramente a dónde va a parar el dinero”. Desde 2007 realizan evacuaciones a Europa. Gestionaron un total de 39, 18 niñas y 21 niños. Para ello trabajan con nueve hospitales europeos y nueve instituciones encargadas de la acogida de los pacientes y su cuidado tras la operación.
Aunque la librería en Vigo, de donde salen parte de los fondos para esta acción, ya lleva meses operativa, la inauguración oficial será el 16 de noviembre, día que ofrecerán un jornada de puertas abierta a todos los interesados.

La importancia del voluntariado

Para la labor de Aida la acción del voluntariado es de vital importancia, tal y como señala Raquel Rodríguez: “El día de puertas abiertas queremos dar a conocer la librería para atraer más colaboradores”. En estos momentos hacen turnos de 3 horas a la semana para despachar en la librería. Sin embargo, se necesitan más, al menos dos personas de cada vez, ya que se requiere catalogar los libros y ordenarlos.
La venta de cada ejemplar queda registrado y al tratarse de una aportación a una ONG, su coste se deduce en la declaración de la Renta. También queda constancia de todas las donaciones que se reciben. “Para nosotros es muy importante aparecer en las cuentas del Estado, ya que así entra en el reparto de las aportaciones a colectivos sociales que se destinan desde las declaraciones de IRPF”, indica Raquel.Aida comenzó a funcionar como Organización no Gubernamental de Cooperación al Desarrollo en  1999 en Madrid. En sus estatutos recoge que su misión es “promover el desarrollo integral de los pueblos y la mejora de las condiciones de vida de las comunidades más desfavorecidas, buscando contribuir de la manera más eficaz y eficiente posible a la acción general contra la pobreza”. A lo largo de su trayectoria tuvo campañas en catorce países en vías de desarrollo. Actualmente concentra su trabajo en Marruecos, Guinea Bissau, Senegal, Líbano y Bangladesh. Trabaja a partir de socios locales conocedores de la realidad del país. La mayor parte de los proyectos que pone en marcha están relacionados con labores productivas (acuicultura, agricultura, silvicultura y pesca), aunque también realizan trabajos en Sanidad, Educación o derechos humanos.  Desde hace tres años creó un fondo social y becas de comedor para familias de Vallecas.

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