El coto de pesca abierto durante una semana en el Lagares ha quedado convertido en una zona de veda. Los trechos afectados son el tramo del río comprendido entre el puente de la Avenida de Madrid y el puente de Muíños, con una longitud de 7,8 kilómetros.
El segundo tramo es lo que discurre entre la Ponte Babío y la desembocadura en el Lagares, con una longitud aproximada de 3 kilómetros.
Dicha veda se fundamenta en la necesidad de favorecer la recuperación de la fauna del río, tras el impacto causado por el vertido registrado el 23 de marzo, pocos días después de la apertura de la temporada de pesca. La veda se mantendrá incluso la entrada en vigor de la normativa de pesca fluvial de la temporada de 2015.
En 2008 se produjo una grave contaminación en el Lagares como consecuencia de un incendio en una nave industrial. Al curso fluvial llegaron restos de los productos de limpieza que se almacenaban en la nave, junto con productos empleados para apagar el fuego, que afectaron a la fauna, por lo que se recogieron peces muertos.
El estado en el que quedaron las poblaciones aconsejó una veda del curso principal del río Lagares en la temporada de 2009. Esta veda incluía un tramo del detengo de pesca de Fragoso. Al año siguiente se extendió también todos los afluentes para favorecer la recuperación de la trucha.
En los años siguientes, el Servicio de Conservación de la Naturaleza realizó el seguimiento de la recuperación de las poblaciones de pescados en la cuenca del río Lagares. Los resultados del inventariado con pesca eléctrica permitieron la reapertura del detengo de pesca de Fragoso en la temporada de 2014. Al mismo tiempo también se creó un tramo libre de pesca sin muerte en el curso principal del río, aguas abajo del tramo acotado.
El 23 de marzo, un nuevo vertido en un de los afluentes del Lagares afectó al tramo libre de pesca sin muerte recién creado. Aunque la mortandad no fue tan severa como en 2008, el estado de las poblaciones de pescados aconseja vedar con carácter de urgencia los tramos afectados, tanto en el curso principal como en el afluente Barxa.
Por suya parte, Aguas de Galicia (en colaboración con Seprona y Concello) realizó ya una ronda por todas las empresas sin resultado aunque aparecieron algunas irregularidades. n
