Prorroga la prisión del marido por golpear suspuestamente con una maza en la cabeza a la víctima
Un viaje de negocios a Vigo se convirtió para un matrimonio portugués aparentemente perfecto en una pesadilla que pudo acabar en tragedia. La pareja, millonaria, se había trasladado el domingo desde Oporto porque el hombre, de 56 años e ingeniero de profesión, tenía una reunión a primera hora del lunes.
En lugar de acudir a la cita, la mujer, de 26 años, acabó en el hospital con cuatro heridas sangrantes en la cabeza y el hombre, detenido y custodiado en de Cuidados Intensivos del Hospital Álvaro Cunqueiro tras sufrir un infarto.
Los hechos que ocurrieron a primera hora del lunes en la habitación de un céntrico hotel de Vigo, donde la pareja se hospedaba, están siendo investigados por el juzgado de Violencia de Género, que ayer decretó la apertura de un sumario urgente al detectar indicios de un supuesto intento de asesinato, por lo que prorrogó la detención del presunto agresor, hasta que sea posible tomarle declaración una vez que reciba el alta hospitalaria.
Los indicios con los que cuenta el juzgado se basan tanto en las lesiones que presentaba la víctima, como en su testimonio y el arma intervenida por la Policía. La mujer fue atendida de cuatro cortes en la cabeza compatibles con el arma hallado en la habitación, una maza de cantero (con un lado puntiagudo). El hecho de que el propio establecimiento negara que pudiera haber un maza en la habitación indica que el hombre la llevó consigo hasta Vigo, con ella, presuntamente habría sorprendido a su mujer por la espalda cuando ésta se encontraba en el baño.
Una agresión inesperada sin motivo aparente
n n n La víctima declaró ayer ante el juzgado de Violencia de Género de Vigo durante cerca de dos horas. En su relato habría negado cualquier tipo de pelea, conflicto o riña previa y señaló como un ataque sorpresivo la agresión sufrida.
El matrimonio había llegado el domingo por la tarde a Vigo. A la mañana siguiente, cuando la joven se disponía a ir a la ducha, su marido, según su versión, la atacó por la espalda con una maza con la que le golpeó en la cabeza hasta en cuatro ocasiones.
Tras conseguir zafarse del ataque y a pesar de las heridas, salió de la habitación y arrastrándose por el pasillo pidió ayuda, momento en el que el marido, dentro, sufría un ataque debido a una afección cardiaca previa.
La víctima pidió una orden de protección.n
