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Juan Pinzás se sumerge en “El vientre de Europa”

El director Juan Pinzás, con Ramón Jiménez, de la Casa de Galicia en Madrid y la productora, Pilar Sueiro.
photo_camera El director Juan Pinzás, con Ramón Jiménez, de la Casa de Galicia en Madrid y la productora, Pilar Sueiro.

La nueva película del director vigués llegará el 17 de noviembre a la cartelera de viente salas de toda España, incluidas las de Vigo

nnn El cineasta vigués Juan Pinzás presentó ayer su nueva película “El vientre de Europa” en la Casa de Galicia en Madrid junto al coordinador de actividades culturales del centro gallego, Ramón Jiménez, y la fundadora de las productoras cinematográficas PS Films y Atlántico Films, Pilar Sueiro. Su nuevo filme llegará a veinte salas de cine de toda España, incluido Vigo, el próximo viernes 17 de noviembre.
“Es una película a contracorriente para que el público saque conclusiones. Llega un momento en que uno va cumpliendo años y se da cuenta de que tiene que hacer el cine en el que cree, el cine terapéutico que necesita para seguir vivo”, dijo el director en declaraciones a  Europa Press.
En la película, la primera de una triología, aparece el cineasta Julián Pintos, álter ego de Pinzás, quien está inmerso en un universo onírico desde el cual realiza un viaje introspectivo desde el vientre de la madre al vientre de Europa, todo ello sin romper el cordón umbilical. “Hay mucho de personal en esta película”, explicó. También destacó el papel de la mujer en la trama e insistió que “la mujer es superior al hombre y más inteligente”. El rodaje se realizó en 2015, entre Madrid y Berlín, en cuatro etapas que corresponden a las estaciones.n

único español en seguir las diez normas de dogma 95

Se trata del único cineasta español que se adhirió a los postulados artísticos del Dogma 95, movimiento fílmico vanguardista iniciado en 1995 por los directores daneses, Lars von Trier y Thomas Vinterberg, y se sirvió de algunos principios del movimiento para realizar su nuevo trabajo. En concreto, creó un decálogo con diez normas que, según él, cumple “a rajatabla” y que se basa en las ideas promovidas por Von Trier y Vinterberg. Así, la película de Pinzás respeta diez normas como son: el guión es una guía y no una Biblia a seguir; la trama invita a la reflexión; se incluye algo nuevo cada semana; el estilo es personal, se vive el rodaje en su totalidad sin ningún tipo de distracción externa; se prima lo artístico sobre lo comercial, se incorporan obras artísticas de otros autores y se utilizan actores profesionales y no profesionales. “El 22 de enero de 2015 redacté este diálogo con estas normas y lo registré como propiedad intelectual junto al primer guión escrito y un resumen del resto y lo hice para que quedara constancia de que lo había escrito y para adquirir ese compromiso de qué normas tenía que cumplir”, apuntó Pinzás.n
 

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