La jueza del Registro Civil envía la mayoría de solicitudes a Extranjería para evitar fraudes
n n n La detención hace sólo una semana de dos personas acusadas de falsedad documental al facilitar a un ciudadano extranjero los trámites para obtener el permiso de residencia inscribiéndose como pareja de hecho de la arrestada es uno de los numerosos enlaces fraudulentos que la Policía Nacional de Vigo ha conseguido detectar gracias al estricto control de Extranjería por orden de la jueza del Registro Civil.
Desde hace algo más de cuatro años y ante el incremento de solicitudes de matrimonios mixtos (uno de los cónyuges es extranjero) que llegaban hasta el Registro Civil, la jueza decidió reforzar el control sobre estas peticiones, en colaboración con la Fiscalía, enviando los expedientes a la Brigada de Extranjería de la Policía Nacional.
Según explicaron fuentes policiales, lo que surgió desde Vigo se ha ido extendiendo a todo el área sur de la provincia, al que da servicio la Comisaría viguesa y en la actualidad, la mayoría de expedientes de solicitud son comprobados por los agentes, cuyo informe es remitido al Registro Civil. Ante cualquier sospecha de posible irregularidad, el informe llega a Fiscalía quien puede solicitar más pruebas y finalmente rechazar dicha petición si bien es la jueza finalmente quien debe o no autorizar el matrimonio.
En la ciudad, según los últimos datos del Registro Civil, las bodas mixtas suponen alrededor de un 10% de los enlaces celebrados, sobre el centenar, y curiosamente, en el primer año de inicio de la crisis, se produjo un importante incremento de bodas religiosas en las que uno de los novios era inmigrante, llegando a ser más del 35% de los enlaces, mientras que ya en ese año, comenzaron a descender entre cónyuges nacionales.
La población inmigrante en Vigo, a fecha 1 de enero se situaba en los 16.542 habitantes, siendo 10.513 ciudadanos no comunitarios. La estadística judicial sobre matrimonios refleja que la mayoría de bodas mixtas se registran con personas procedentes de Brasil y Argentina, además de Portugal.
La Policía Nacional asegura que aunque la mayoría de las solicitudes que se reciben son válidas, este sistema permite detectar posibles casos de conveniencia, que se siguen detectando principalmente entre personas que contactan por internet o parejas en las que hay una notable diferencia de edad.
El mayor riesgo y de ahí la vigilancia extrema tras el incremento de población, es la reagrupación familiar, ya que la persona extranjera que se casa con un a española tiene derecho al permiso de residencia a los 12 meses y también a traer al país a los familiares que tiene a su cargo lo que supone una vía de entrada de inmigración ilegal.n
