El ministerio público solicitó el régimen cerrado para los tres menores arrestados en Vigo
La Fiscalía de Menores de Pontevedra solicitó ayer el internamiento en régimen cerrado de los tres chicos que el jueves pasaron a disposición judicial como presuntos autores de un robo con violencia en la casa rectoral de Domaio, en Moaña, el pasado mes de agosto.
El ministerio público tomó esta decisión como medida cautelar, tras la investigación de la Guardia Civil y la toma de declaraciones efectuada por el fiscal de Menores encargado del caso, que ayer llevó a cabo una rueda de reconocimiento, informaron fuentes de la Fiscalía Superior de Galicia.
Como consecuencia del asalto, el párroco tuvo que ser hospitalizado varios días por las lesiones sufridas al ser atado y golpeado con una bombona de butano, con la que le rompieron la mandíbula.
Los arrestos de los tres menores, de nacionalidad rumana y con edades comprendidas entre los 16 y 17 años, se produjeron tras quince días de investigación, análisis de pruebas y servicios de seguimiento y vigilancia en Vigo.
La colaboración vecinal y las aportaciones de varios testigos, así como la declaración testifical de la propia víctima resultaron "decisivas" en la investigación, según reconoció la Guardia Civil.
Uno de los detenidos cuenta con antecedentes por otro robo con violencia y resultado de lesiones registrado este mismo año en Vigo.
En los registros practicados en los domicilios de los arrestados en distintos puntos de Vigo, la Guardia Civil se incautó de varios efectos de procedencia desconocida, entre ellos dos ordenadores portátiles, una cámara de vídeo, un teléfono móvil y una pistola eléctrica de pintar.
Entre el botín que se llevaron dinero y un ordenador.
La Guardia Civil considera que se trata de tres jóvenes especialmente violentos.n
