Las casetas dejaron la Alameda para ir más al centro y aunque crecen las visitas no les convence su ubicación en Progreso. En verano se venden más guías de viajes y libros de bolsillo, estos días con un 10% de descuento
nnn La Feria del Libro aspira a ocupar un sitio más céntrico el próximo año, en Príncipe o en Porta do Sol, en lugar del Progreso, donde se sienten algo comprimidos porque tampoco pudieron usar la calle Londres al estar reservada para ImaxinaSons. Abandonaron su sede histórica en la Alameda, porque dejó de ser una zona tan transitada (ellos querían darle un impulso) y porque no les dejaban ocupar el bulevar central (estaban pegados al tráfico rodado y les parecía un riesgo). El año que viene si tienen que elegir entre la Alameda y O Progreso podrían volver a su ubicación de siempre. A pesar de esto, están contentos con la afluencia de público registrada el sábado.
La visita merece la pena
Solo en la Feria del Libro (está hasta el 12 de julio en la calle Progreso) se pueden hacer descuentos, en este caso del 10%, además del Día del Libro, el 23 de abril, porque es un sector regulado con precios fijos. Por si fuera poco aliciente, la feria es la oportunidad para conocer a los autores porque cada día hay presentaciones, para sumarse a distintas actividades y sobre todo para escuchar a los libreros. “Ellos saben aconsejar el libro más adecuado al gusto de cada uno”, explica el presidente de la Agrupación de Libreiros de Vigo, Xurxo Patiño, quien anima a los ciudadanos a dedicar tiempo, a mirar y a disfrutar. “No somos una feria muy grande, pero hay una pluralidad, hay libro infantil, cómic, reproducción facsímil de códices, mapas y manuscritos iluminados, la librería especializada en libro gallego y portugués, y las de toda la vida, así como las bibliotecas públicas Neira Vilas(Concello) y Juan Compañel que difunden su oferta y hacen socio al que aún no lo es.
Las librerías no venden más en verano, pero sí cambia la demanda. Uno de los protagonistas son las guías de viajes (“aunque hay información en internet, hay guías que son una maravilla”) y aquí los libreros saben como las agencias de viaje que no fallan las capitales europeas, Estados Unidos, China, cabo Verde y otros destinos exóticos. La segunda característica de las vacaciones es que predomina el libro de bolsillo, más cómodo para la playa, y la lectura ligera que no precisa tanta concentración.
Ayer la feria contó con un taller de cocina con algas y especias a cargo de Carmen Freire, talleres infantiles, recitales poéticos y la firma de libros con Sechu Sende y José Luis Casteleiro y Miguel García Seoane. Y hoy muchos más.
