Vigo

Érguete no renuncia a encontrar un local para el programa Sereos

La asociación Érguete continúa buscando un local para ubicar el programa Sereos un año después del cierre del local de la calle Elduayen y tras los intentos frustrados de intentar habilitar otros dos en Jacinto Benavente y O Berbés. 

Por ahora, el servicio de “calor-café” continúa prestándose desde una furgoneta que se instala delante del Auditorio de Beiramar pero que también recorre otros puntos de la ciudad. 
“Seguimos buscando un local y el alcalde está de acuerdo, por supuesto, pero no es cierto que no venga gente. Han bajado algo los usuarios, es verdad, pero sigue viniendo gente”, aseguró ayer la presidenta de Érguete, Carmen Avendaño, que insistió en que se sigue buscando una ubicación pero que si se encuentra no se hará pública para evitar las reacciones ciudadanas de las ocasiones anteriores. “Me da un poco de pena y me duele porque siempre voy presumiendo de ciudad solidaria y hubo actitudes que dejaron mucho que desear”, señaló al respecto de las protestas surgidas en Torrecedeira cuando se pensó ubicar Sereos en el pabellón del Berbés.
“Tenemos que resolverlo de una manera u otra y ahora estamos viendo para un proyecto con terceras personas a ver si fragua porque es un servicio muy necesario que atiende a muchas personas que están en la calle”, indicó.
Al respecto de las quejas del colectivo de autoayuda El Imán, que hoy organiza una jornada reivindicativa en la Praza da Princesa a partir de las 11 horas para exigir la apertura de un local para el programa Sereo, Avendaño dijo ser “muy respetuosa” con los movimientos sociales y con el portavoz del grupo, Antón Bouzas, pero lamentó que “mientras que él es partidario de la denuncia continua yo soy más partidaria de la negociación continua”. “Es verdad que no son las condiciones idóneas pero sí que viene gente”, subrayó.
Avendaño acudió ayer al Concello para formalizar el convenio del programa de Coidadores de Barrio, por el que se han contratado a 49 personas para prestar servicio en el Casco Vello y Calvario pero también en Teis, As Travesas, Coia y Bouzas con un presupuesto para este año y 2015 que ronda el millón de euros. “Es un programa muy bueno por el que nos preguntan en todas partes. Da una oportunidad a los trabajadores que en muchos casos ya habían perdido la esperanza y ayudan a personas que viven solas, en su mayoría ancianos. Se aportan cosas mutuas”, remarcó.n 

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