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El Cunqueiro implanta una válvula cardiaca sin precedentes en España

photo_camera El equipo médico de Cardiología y los directivos del área sanitaria asistieron a la presentación de esta intervención pionera.

El servicio de Cardiología del Cunqueiro implantó una válvula en el corazón a una viguesa de 81 años en una intervención sin precedentes en España.  Es la cuarta vez que se realiza en el mundo: sólo hubo dos en Alemania y una en Suiza. La enferma, que apenas podía caminar y tenía muchos problemas para dormir, ahora lleva una vida normal 

Cardiología del Cunqueiro realizó una intervención única en España, con la colocación de un implante hecho a medida de una paciente de 81 años que padecía una insuficiencia de la válvula tricúspide con pronóstico grave. 
En todo el mundo solo se habían hecho hasta ahora tres operaciones similares, dos de ellas en Alemania y una en Suiza. La válvula tricúspide está en el lado derecho del corazón y es la que permite que fluya la sangre desde la aurícula derecha al ventrículo derecho. Cuando falla, la sangre fluye en dirección opuesta (regurgitación) provocando fatiga, dificultades respiratorias, hinchazón en las piernas y puede poner en peligro la vida del paciente.

La mujer operada, que hoy se encuentra bien y lleva una vida normal adecuada a su edad, decía a su médico antes del implante que “camino diez metros y me tengo que parar” y no podía dormir con almohada, entre otros problemas que hacían muy complicada su vida ordinaria.
¿Por qué esta intervención se pudo hacer en Vigo? En primer lugar porque el servicio de Cardiología del Complejo Hospitalario Vigués es líder en España en la implantación de válvulas cardiacas mediante técnicas mínimamente invasivas. El año pasado colocó 111 válvulas aórticas y otras 34 más en tratamientos de insuficiencia de la válvula mitral. La previsión para este año sólo en válvulas aórticas es que se implanten 130. Sin embargo, también fue decisivo el contacto que mantienen los profesionales vigueses con la industria más innovadora y en la búsqueda de soluciones para los pacientes dieron con el fabricante de esta válvula. Se trata de una prótesis que se tiene que fabricar a medida del paciente (tarda un mes). Está hecha de Nitinol (una mezcla de níquel y titanio de gran eslasticidad) y recubierta de pericardio porcino (el tejido biológico con el que se hacen la mayor parte de las prótesis). Es un ejemplo de medicina personalizada y se llevó a cabo tras solicitar una autorización al Sergas. En toda Galicia se calcula que puede haber entre 30 y 40 pacientes de estas características.
La operación se realizó el pasado día 22 de agosto y se presentó ayer  para garantizar que la paciente había evolucionado bien, como así fue. A la presentación acudió buena parte del servicio de Cardiología, el gerente del área, Félix Rubial, y la directora médica, Mar Vázquez. Las explicaciones corrieron a cargo del jefe del servicio de Cardiología, Andrés Íñiguez, y dos jefes de sección de Cardiología, Franscisco Calvo y José Antonio Baz. Explicaron que la novedad fue unir uno de los extremos de la prótesis a la vena cava superior y el otro a la vena cava inferior. De esta forma la prótesis sustituye la función que debía realizar la válvula tricúspide para el correcto bombeo de sangre por el corazón.
El tratamiento quirúrgico de esta insuficiencia (una operación abierta) arroja índices de mortalidad muy altos, con una supervivencia de entre un 10% y un 15%. Por eso, el equipo del doctor Íñiguez valoró implantar una endoprótesis mediante técnicas de catéter como está indicado en pacientes con alto riesgo quirúrgico como era el caso o inoperables. La prótesis funciona a modo de stent y previene el flujo retrógrado de sangre hacia las cavas. Con este procedimiento abren un espacio a la esperanza para pacientes que no tenían una alternativa efectiva.n
 

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