Una reunión el lunes fijarán las acciones a tomar al continuar la reducción de los embalses. El día 1 se pasará a otra fase
nnn La sequía ya se ha convertido en un argumento político y ayer hubo declaraciones cruzadas muy duras entre el alcalde y Miguel Fidalgo, del PP, sobre la gestión de los recursos. Finalmente, Concello y Xunta acordaron fijar una reunión para el lunes en Santiago, en la sede de Augas de Galicia, el organismo regulador de las cuencas, a la que acudirá por parte municipal el concejal David Regades y donde se fijarán las medidas a tomar en adelante. El día 1 si no hay mejora en el nivel de los embalses -al 40 por ciento de media- Vigo pasará a la fase de "escasez severa" que incluye recortes en el suministro. Las perspectivas no son buenas: antes del miércoles no se esperan lluvias al predominar el anticiclón.
En la reunión se decidirán acciones relativas a la reducción del consumo y su control y las peticiones insistentes del Concello de que el caudal ecológico -para mantener vivos los ríos de Eiras y Zamáns- se deje en mínimos absolutos, además de plantear con urgencia la construcción de un azud, un trasvase entre Oitavén y Verdugo para incrementar el nivel de la presa de Eiras. Su coste sería de unos cinco millones de euros.
Por la mañana, Abel Caballero aseguraba que la Xunta había negado su petición de reducir el caudal ecológico en las presas de Eiras y Zamáns y criticó la "conducta negligente" de la Administración autonómica por no actuar "en absoluto" para tomar medidas que mitiguen la sequía en Vigo. En una rueda de prensa -tras otras del PP en la que le exigía acciones- trasladó su "gran preocupación por la situación del agua en Vigo" y porque en este marco haya "una inactividad total de la Xunta, que puede tener gravísimas consecuencias en esta ciudad" y de las que responsabilizará a Alberto Núñez Feijóo.
Recordó que reclama la reducción del caudal ecológico en Eiras y Zamáns y la construcción de un azud entre el Oitavén y el Verdugo, porque la ciudad puede "ahorrar mucho, pero no va a ser suficiente si no llueve". "Y nos tenemos que poner en esa hipótesis, porque puede pasar", remarcó.
Sobre su petición del azud insistió en que tienen que tomar una decisión inmediata, por vía de urgencia". Además, en cuanto a la solicitud de bajar el caudal ecológico a 150 litros por segundo indicó que la Xunta contestó que se viertan al río "595 litros por segundo", lo que supone "desperdiciar 445 litros por segundo", es decir, "el 50 por ciento" del agua que se consume en Vigo. "¿Cómo se puede decir esto? ¿Qué es lo que pretenden? ¡Qué se acaba el agua en la presa de Eiras! ¿o es que no se enteran?".
En relación con el mismo tema, el concejal del PP Miguel Fidalgo acusó al regidor vigués de ser quien no ha hecho "nada" durante los 14 meses que llevaba la ciudad en situación de prealerta, ante lo que le ha reclamado "que ejerza como alcalde y empiece a tomar decisiones que están en sus manos para reducir el consumo de agua". En concreto, le propuso "modificar la tarifa del agua para incentivar al consumo responsable; cumplir con el plan de emergencia. ¿Qué ha hecho aparte de reducir un poco los baldeos?", advirtió. n
